La titular del juzgado de instrucción número 1 de La Seu d'Urgell (Lleida) ha decretado libertad con fianza de 145.000 euros para el exconsejero de Gobernación Jordi Ausàs, acusado de integrar una red que se dedicaba de forma "profesional" al contrabando de tabaco desde Andorra.

La juez, que ha interrogado a los nueve acusados, ha dejado a dos de ellos en libertad provisional y ha fijado fianzas que van de los 23.000 a los 145.000 euros para los demás detenidos, a los que imputa un delito continuado de contrabando de tabaco y un delito de pertinencia a grupo criminal organizado.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) en un comunicado, los siete acusados a los que la juez ha impuesto una fianza, que permanecen en la comisaría de los Mossos d'Esquadra en La Seu d'Urgell, irán a la cárcel hasta que notifiquen el ingreso correspondiente en la cuenta bancaria del juzgado.

Al exconsejero del tripartito y exalcalde de La Seu d'Urgell, Jordi Ausàs (ERC), la juez le ha impuesto la fianza de 145.000 euros que reclamaba la Fiscalía (su abogado había afirmado por error que el ministerio fiscal había pedido 150.000), ya que considera que existe un riesgo de fuga "evidente" y un riesgo "claro" de que destruya pruebas, ya que la investigación policial todavía no ha finalizado.

La juez justifica en el auto que haya impuesto una fianza de 145.000 euros para que Ausàs evite el ingreso en prisión ya que esta es la cifra equivalente al valor de la cantidad de tabaco que el exconsejero movió entre el 12 de junio y el 8 de julio de 2012, periodo en el que fue sometido a vigilancia.

Según la juez, la fianza es "proporcionada", ya que, si sólo en el mes en el que se han llevado a cabo las tareas de vigilancia el exconseller ha movido tabaco por valor de 145.000 euros, "muy probablemente en realidad el importe que esta persona ha manipulado es muy superior".

En su auto, la juez sostiene que existen indicios "suficientes" para concluir que los detenidos integraban un grupo organizado que se dedicaba de forma "muy activa" al contrabando de tabaco desde Andorra, ya que la vigilancia policial, las grabaciones con cámara y la intervención telefónica a la que han sido sometidos en las últimas semanas así lo acredita.

De hecho, las detenciones se tuvieron que precipitar el pasado miércoles cuando los investigadores descubrieron que los detenidos sabían que había una cámara que los grababa en el aparcamiento en el que almacenaban el tabaco traído de contrabando desde Andorra, situado en la plaza Camp de Codina de La Seu d'Urgell.

En el caso del exconseller Jordi Ausàs, la juez subraya en el auto que entraba periódicamente y con cierta frecuencia al aparcamiento conduciendo un Audi Q5 y un Suzuki Gran Vitara, donde apilaba varios cartones y los cargaba en su vehículo.

Cuando los Mossos d'Esquadra registraron el domicilio de Ausàs encontraron tabaco almacenado por valor de 14.565 euros, una nota con un cuadro en el que figuraba el precio de varias marcas en Andorra y España, así como el beneficio económico que se podría sacar por la diferencia, y 25.875 euros en efectivo.

Ante la juez, Ausàs se ha negado a declarar, incluso cuando se le han reproducido las imágenes grabadas en las que aparece cargando cajas de tabaco dentro del aparcamiento investigado, junto a otros imputados.

Según la juez, el grupo, en el que cada integrante tenía unas funciones específicas, se dedicaba de forma "profesional" al contrabando, ya que sus miembros tenían "perfecto conocimiento" de la legalidad vigente, por lo que nunca acumulaban tabaco por un valor de más de 15.000 euros, para no rebasar el límite en el que el contrabando de tabaco pasa a ser considerado delito.

La segunda fianza de más valor la ha impuesto la juez al sargento de la Guardia Civil Julián G.M., que tendrá que depositar 140.000 euros para eludir la cárcel, acusado, al igual que Ausàs, de entrar periódicamente en el aparcamiento para retirar el tabaco almacenado.

Precisamente, la esposa del agente de la Guardia Civil, que también figura entre los imputados, ha sido la primera de los acusados que esta tarde ha abandonado la comisaría de los Mossos d'Esquadra en La Seu d'Urgell, donde permanecen los demás implicados mientras sus abogados trabajan para reunir dinero y avales para depositar la fianza y evitar que pasen la noche en la cárcel.