María Garzón, hija del juez Baltasar Garzón, ha defendido la actuación de su padre en las causas por las que fue investigado en el Tribunal Supremo (TS) y ha asegurado que ni es el "mayor poseedor de la verdad" ni el "mayor delincuente de este país".

La hija del magistrado ha hecho estas manifestaciones en la presentación de su libro 'Suprema injusticia. Toda la verdad sobre el final del juez Garzón', un relato en primera persona de cómo ella y su familia han vivido los "últimos y difíciles" tiempos de su padre desde que el 14 de mayo de 2010 bajara por última vez la escaleras de la Audiencia Nacional. "Habían pasado apenas unos días desde la sentencia que inhabilitaba a mi padre a once años fuera de la carrera judicial -de una carrera de más de treinta años- y los sentimientos aún los tenía a flor de piel", ha relatado la autora al recordar cuando decidió contar su testimonio.

Y lo hizo, según ha dicho, porque "se lo debía" a su padre, a su familia y a "toda la gente de a pie" que le ha apoyado y que ha demostrado que la idea de que Garzón está solo "es totalmente falsa". Prueba de ello -añade- es la petición de indulto que ha planteado al Ministerio de Justicia la Asociación de Magistrados Europeos por la Democracia y las Libertades (Medel), que agrupa a 15.000 magistrados de once países europeos que están de acuerdo "con la forma de trabajar de Baltasar Garzón".

Sin embargo, la hija del juez no es optimista de cara a la concesión de ese indulto ya que "no es una prioridad", algo que entiende desde el punto de vista de que el Gobierno tiene entre manos multitud de temas económicos que resolver, si bien cree que no es una "prioridad ideológica".

Con este libro la autora quiere también denunciar "algunas irregularidades" que, en su opinión, se han cometido en los tres procesos: las escuchas del caso Gürtel -por la que ha sido inhabilitado-, los crímenes del franquismo -resultó absuelto-; y los cobros que recibió durante su estancia en la Universidad de Nueva York -que se archivó-.

Asegura estar cansada de ver cómo "se corrompe el sistema" y de no entender por qué la Justicia puede sentar en el banquillo a un juez "sin ofrecerle un juicio justo" que tampoco tiene derecho a una segunda instancia "cuando el resto de ciudadanos lo tiene". "La imagen de la Justicia española está tocada pero no se puede pensar que no funciona. Sería injusto decir que no funciona por el lugar en el que ha situado a mi padre", ha opinado.

Ha explicado que su padre siempre ha conocido las consecuencias de todos sus actos pero que no por ello "se ha amedrentado" y ha asegurado que "nunca" ha antepuesto sus prioridades en una investigación. "Ni Baltasar Garzón es el mayor poseedor de la verdad y nunca se equivoca. Al revés, es una persona humana y se equivoca como todo el mundo, lo bonito de todo es saber reconocer los errores y aprender de ellos. Pero tampoco es el mayor delincuente de este país", ha dicho.

Tras el "duro golpe" que supuso la inhabilitación, María Garzón asegura que su padre ahora comienza una nueva etapa y que será una "decisión suya" si después de once años decide volver a la judicatura. "Yo no se lo aconsejaré. Yo quiero que se dedique a los derechos humanos y, a poder ser, fuera de estamentos gubernamentales", ha concluido.