Terrorismo

El Gobierno cree que "existe un sustrato de capacidad operativa y de atentar de ETA"

El secretario de Estado de Seguridad asegura que no sobrepasan "la veintena" pero que son "muy escurridizos".

El secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, ha asegurado este miércoles que todavía "existe un sustrato de capacidad operativa y de atentar de ETA", con un número de miembros "limitado" que según las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "no sobrepasaría la veintena".


Así lo ha asegurado Ulloa en una entrevista en la Cope,al ser preguntado sobre el informe emitido el pasado 25 de abril por Europol en el que afirmaba que la banda terrorista "sigue reclutando nuevos miembros y recabando información sobre nuevos objetivos".


"El informe que salido de Europol es producto de la información que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado remitió al organismo europeo de Policía. En consecuencia, yo no puedo decir que lo que ha dicho Europol sea incierto sino que es escrupulosamente cierto", ha aseverado.


En este sentido, Ulloa ha señalado que ETA contaría en estos momentos "con un aparato logístico de apoyo", cuya actividad ha sido detectada "porque se producen cambios de vehículos, de domicilios y falsificación de documentos". "También se ve mucho trasiego a un lado a otro de la frontera", ha añadido.


"En consecuencia, como nos corresponde, tenemos que estar en guardia, para eso nos pagan los españoles, para tratar de garantizar la seguridad, y todo lo que sea un movimiento encaminado a la comisión de hechos ilícitos de carácter terrorista tenemos que actuar de manera preventiva e incluso tratar de eliminarlo", ha apuntado.


"Son escurridizos"


No obstante, el secretario de Estado ha reconocido que los miembros de este "sustrato" de ETA "son escurridizos" y "no se producen las detenciones" que al Ministerio del Interior le gustaría. "Estas personas están bien entrenadas y saben hacer su trabajo dentro de la clandestinidad y eludir perfectamente la acción de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", ha señalado.


Por todo ello, ha explicado que, a su parecer, "las reflexiones que se efectúan en el ámbito español" y que señalan un final definitivo de la banda "son llevadas muchas veces por un sentimiento de la esperanza de que la paz podría estar cerca". "A todos nos gustaría alcanzarla", ha confesado.


No obstante, ha matizado que "la paz está en manos de estos señores" y en las del Estado. "La democracia siempre ha actuado de la misma manera. Ellos son los que han generado estas expectativas pero no es bastante generar expectativas y menos cuando pueden resultar falsas", ha dicho, para añadir que "les corresponde a ellos entregar las armas y disolver y liquidar" la banda, "si de verdad no tienen como objetivo atentar".


Plan de reinserción


Sobre el Plan de Reinserción para presos terroristas anunciado por el Gobierno y la polémica que ha suscitado, Ulloa ha reconocido que puede que el Ministerio no haya sabido "explicar bien" qué es lo que se pretende con dicho plan. "El programa de por sí puede tener su utilidad hasta el punto de que el hecho de que se decline de la violencia y se desvinculen con la banda les permite pensar por sí mismos", ha explicado.


"Yo reconozco que tal vez no hubo una buena comunicación y que incluso fue una cuestión de tiempo", ha señalado, para defender que en todo momento se ha mantenido "el horizonte claro" en lo que a la política penitenciaria se refiere y que pasa por hacer que los terroristas "pidan perdón" y se desvinculen.


Así, ha explicado que el plan tiene como objetivo "potenciar que los presos puedan decidir por sí mismo reintegrarse en la sociedad" y evitar que se vean de esta forma influenciados por "la banda o el grupo político" que desde fuera continúan "tocando moqueta" y diciéndoles lo que tienen hacer. "Creo que ha quedado bastante patente que los presos de ETA actúan de una forma coordinada y colectiva conforme a las imposiciones de la banda", ha asegurado.


En este sentido, ha explicado que al igual que hay "multiplicidad de programas" para permitir que los delincuentes se reinserten, como por ejemplo, los destinados a los toxicómanos, "se pensó en la posibilidad de crear un programa específico para terroristas en el que mediante la renuncia a la violencia y el abandono de los vínculos con la organización criminal se les facilitaba la inclusión dentro de lo que sería el régimen ordinario de la Administración Penal".


Todo ello, ha matizado, siempre que el preso hubiera llevado a cabo "el cumplimiento de la pena, el perdón a la víctima y la indemnización". "En eso consistía lo que se trató de transmitir y que generó tanto revuelo en muchos ámbitos", ha añadido.