El Gobierno hará cumplir la ley si no se respeta el horario

El Gobierno ha anunciado que hará cumplir la ley, y avisó al movimiento 15M que permanecer en Sol más allá de los horarios permitidos supondrá vulnerar dicha ley. El director general de la Policía informó que, además de actuar con "prudencia, firmeza e inteligencia", "la única línea roja que no se va a consentir es el uso de la violencia".

Con motivo del aniversario del 15M, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que permanecer en la Puerta del Sol los próximos días más allá del límite horario de las 22.00 horas fijado por la Delegación de Gobierno será vulnerar la ley y apuntó que el Ministerio del Interior hará que se cumpla. Desde el movimiento 15M ya se ha dicho que no van a cumplir esa restricción horaria.

"Lo que va a hacer el Gobierno y el Ministerio del Interior y la Delegación del Gobierno es que se cumpla la Ley y que se cumplan esa concentraciones en los horarios previstos. Más allá de esos horarios, las manifestaciones no estarían autorizadas y no estarían actuando con arreglo a la ley", decía Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Sáenz de Santamaría hizo un llamamiento al "respeto a la Ley", ya que, según indicó, "es la que permite manifestarse, pero al resto también ejercer su libertad". "Más allá de esa horas se estaría vulnerando la Ley y los derechos de los demás y lo que va a hacer el Gobierno es que se cumpla la Ley".

El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, señaló este viernes que durante las concentraciones del 15M "la única línea roja que no se va a consentir es el uso de la violencia", al tiempo que explicaba que la Policía va a actuar "con prudencia, firmeza e inteligencia".

"En todas las concentraciones que están autorizadas la obligación de la Policía es garantizar la seguridad. La única línea roja que no estamos dispuestos a consentir, incluso en las que están autorizadas, es el uso de la violencia. Ahí estamos obligados a intervenir", decía Cosidó en una rueda de prensa ofrecida en el complejo policial de Canillas.

En este sentido, al ser preguntado acerca de la ya anunciada intención del movimiento de no obedecer el límite horario impuesto por la Delegación del Gobierno, Cosidó declaró que la Policía actuará "con prudencia, firmeza e inteligencia". A partir de ahí, lanzó un mensaje de "tranquilidad" y dijo que en Madrid son habituales las concentraciones.

"La presencia policial es una garantía para todos", sostenía al tiempo que ha advertido de que la Policía está para hacer cumplir la ley y garantizar la seguridad de los que se manifiestan y de los que no.

Además, señaló que "las plazas son para los ciudadanos y nadie puede apropiarse de ellas" porque "son espacios públicos". "Lanzo un mensaje a la sociedad de que tenga confianza en la Policía", subrayó Cosidó.

Por otro lado, el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, seguirá el desarrollo de las concentraciones convocadas en Madrid y en otras ciudades españolas desde la sede del Ministerio de Interior, según informa a Europa Press fuentes de este Departamento.

Estas mismas fuentes precisaron que en la sede del Ministerio se reunirá para la ocasión un centro operativo de control que estará encabezado por Ulloa y por altos mandos del Cuerpo Nacional de Policía.

La Policía no permitirá que se acampe

El portavoz de la Confederación Española de Policía (CEP), Lorenzo Nebreda, expresó este viernes que afrontan "con optimismo" las concentraciones que va a llevar a cabo el movimiento, al tiempo que resaltaba la preparación previa de las unidades especializadas que se encargarán de velar por la seguridad en la madrileña Puerta del Sol.

En declaraciones a Europa Press Televisión, Nebreda subrayó que los agentes conocen "perfectamente" cómo se organizan y gestionan las asambleas del movimiento y la experiencia va a facilitar su trabajo. Para las concentraciones, el sindicato de Policía ha puesto en marcha un dispositivo integrado por unos 1.500 policías "preparados".

También, el portavoz del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José María Benito, explicó que se preparan para la concentración de Sol de este sábado con "bastante preocupación" al tiempo que aclaró que, "el movimiento no va acampar porque no se le va a permitir que acampe y en ese sentido la fuerte presencia policial; lo que está autorizado es lo permitido y lo que no, va a ser combatido. Con esa fuerte presencia policial se puede evitar con total normalidad que esta gente pueda acampar. Bastaría que dos filas de compañeros de antidisturbios echaran la gente a los lados de la plaza para evitar acampar", agregó.

El 15-M exige que los agentes vaya "debidamente identificados"

Por otro lado, la Comisión Legal de la vertiente madrileña del 15M interpuso este viernes una denuncia ante el Ministerio del Interior para solicitar que sancione a aquellos agentes del Cuerpo Nacional de la Policía que hayan incumplido la obligación de "ir debidamente identificados en todo momento".

"Esta iniciativa pretende recoger el malestar ciudadano reiterado ante las numerosas movilizaciones en las que los agentes policiales desplegados prescinden u ocultan el número de placa o se niegan a facilitarlo cuando es requerido" aseguraba el colectivo en un comunicado publicado en su página web.

Según el 15M, "es precisamente esa falta de identificación la que ha permitido" que se hayan archivado las "múltiples denuncias por lesiones" presentadas por manifestantes tras el desalojo de la Plaza de Cataluña el año pasado o las cargas policiales de las movilizaciones de estudiantes en Valencia este año.

En el texto que han registrado este viernes en el Ministerio del Interior, y que acompañan de diferentes fotografías, los indignados solicitaban "la iniciación del procedimiento sancionador contra las personas denunciadas en los hechos" contenidos en el escrito, y los cuales detallan cronológicamente.

Así, los indignados aportan documentación de hasta 17 diferentes manifestaciones, concentraciones y desahucios en los que, aseguran, los agentes no iban debidamente identificados, y entre los que se encuentran desde la primera manifestación del movimiento en Madrid el pasado 15 de mayo de 2011 hasta las que tuvieron lugar con motivo de la visita del Papa en agosto o en la reciente huelga general del 29 de marzo de este año.

Según el movimiento, "dado que todos los hechos han ocurrido en el curso del último año y su calificación es, como mínimo, de falta grave, no puede entenderse que se encuentren prescritos ninguno de los mismos, al tener un periodo de prescripción de dos años para el caso de las graves y de tres para las muy graves".