Protocolo policial

La Policía tiene prohibido disparar pelotas de goma a menos de 50 metros

La ordenanza dicta apuntar de cintura para abajo o incluso hacia el suelo, para minimizar los daños físicos por un posible impacto.

La policía vasca portando una escopeta de pelotas de goma
La Policía tiene prohibido disparar pelotas de goma a menos de 50 metros
EFE

Los protocolos de actuación en el uso de material antidisturbios de la Policía y la Guardia Civil prohíben disparar pelotas de goma a menos de 50 metros de los manifestantes y ordena a los agentes apuntar de cintura para abajo o incluso hacia el suelo, para minimizar los daños físicos por un posible impacto.


Así lo han explicado  fuentes de las unidades de intervención policial y del Ministerio del Interior, que han asegurado que los agentes tienen la orden de utilizar al material antidisturbios, como pelotas de goma o gases lacrimógenos, únicamente en casos excepcionales de alteración grave y violenta del orden público.


Ponen como ejemplo los incidentes vividos en las calles de Valencia el pasado mes de febrero, en los que la Policía no llegó a disparar pelotas de goma, ni tampoco lanzó botes de humo a los manifestantes.


Las fuentes consultadas han explicado además que el tipo de pelotas que emplea la Policía y la Guardia Civil desde hace algunos años son de una dureza media, relativamente flexibles y que raramente causan lesiones de gravedad, siempre que se utilicen correctamente y a una distancia prudente.


Su empleo tiene un objetivo específicamente "disuasorio" y se usa solo en casos de extrema gravedad.


El consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, ha anunciado hoy que las patrullas de Seguridad Ciudadana de la Ertzaintza no usarán escopetas lanzadoras de pelotas a partir del 1 de enero del 2013, aunque sí seguirán haciéndolo las unidades de Brigada Móvil.


El anuncio de Ares se produce a raíz de la muerte del joven Iñigo Cabacas a consecuencia de un pelotazo lanzado por agentes de la policía autonómica durante unos incidentes registrados el pasado jueves en Bilbao.


Durante una comparecencia ante el Parlamento Vasco, el director de la Ertzaintza, José Antonio Varela, ha revelado además que la pelota que provocó la muerte del joven se disparó a más de 22 metros y, por lo tanto, no a "bocajarro".


El asunto ha llegado también al Congreso de los Diputados, donde Izquierda Unida ha registrado una pregunta por escrito en la que pide al Gobierno que aclare si piensa renunciar al uso de bolas de goma "como medio disuasorio y represivo en caso de altercados, disturbios o manifestaciones ciudadanas".


Fuentes del Ministerio del Interior han explicado que, por el momento, no se plantean modificaciones en los protocolos de actuación de los efectivos antidisturbios de la Policía y la Guardia Civil, aunque se mantiene una actitud abierta de mejora y perfeccionamiento de los medios existentes.