Tribunales

Las víctimas del presunto ciberacosador comienzan a declarar

Las 81 víctimas del presunto ciberacosador, acusado por pornografía infantil y revelación de secretos, comenzarán a declarar este miércoles.

Juan Carlos Higueras, abogado del acusado, atendió a la prensa a su llegada a la Audiencia.
Las víctimas del presunto ciberacosador comienzan a declarar
EFE

Las 81 víctimas, en su mayoría menores, de un informático acusado de pornografía infantil comenzarán este miércoles a declarar ante el tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid que juzga a Jorge M.C. por múltiples delitos de pornografía infantil y revelación de secretos.


A pesar de que el procesado llegó a contactar hasta con 251 jóvenes, sólo desfilarán por la sala de la Audiencia madrileña las chicas localizadas por la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT).


Las jóvenes relatarán cómo eran víctimas del acoso de Jorge a través del Messenger, el que utilizaba para exigirlas que se mostrarán desnudas ante él bajo la amenaza de que mostraría las fotografías que las arrebataba a sus familiares.


El primer día del juicio, la abogada de las chicas, Carmen Carcelen, se quejó de que el acusado siga en la calle. Tras su detención en 2008, sólo estuvo cuatro meses en prisión pesa a las contundentes pruebas de cargo que pesan contra él.


El procesado, experto en aplicaciones informáticas, está acusado de varios delitos de revelación de secretos, pornografía infantil, contra la integridad moral y amenazas graves, por lo que se enfrenta a 359 años de cárcel.


Según el fiscal, el procesado durante la segunda mitad de 2007, 2008 y comienzos de 2009 ocultó en Internet su verdadera identidad y edad, utilizando fotografías de adolescentes o jóvenes. De este modo, contactó en distintos sitios web, con personas, muchas de ellas menores, con las que iniciaba conversaciones en el messenger. En éstas, el acusado charlaba sobre cosas diversas y también temas sexuales.


Al mismo tiempo, conseguía las contraseñas de Messenger utilizadas por esas personas. Una vez que tenía el dominio de las cuentas, les hacía ver a sus usuarias que disponía del contenido de los mensajes para chantajearlas.


"Ello producía una situación de angustia sobre las chicas, que comprobaban que nada servía si le borraban o readmitían porque se agregaba desde otra cuenta, llegando a utilizar varias cuentas para acosar a uno víctima", señala la Fiscalía.


Según el fiscal, en algunas ocasiones les dijo que conocía donde vivían y les decía que iría allí y les haría la vida imposible. Así, logró que varias de las víctimas accedieran a sus requerimientos de enviarle fotografías y vídeos o que se mostraran desnudas en la webcam.


A raíz de la denuncia de una de las chicas en Madrid, la Policía solicitó al juez que oficiara a Microsoft para que informara sobre todos los datos de tráfico de comunicaciones que dispusiera sobre sus cuentas.


El procesado fue detenido en Chipiona (Cádiz) después de que la Policía comprobara que desde su domicilio en la calle Estrella Polar se habían realizado las conexiones con las citadas cuentas.