Casi la mitad de los coches vendidos el pasado enero en España ofrecían algún tipo de electrificación. Los eléctricos puros crecieron, respecto al mismo mes de 2021, un 258%, los híbridos enchufables, un 123%, y los híbridos autorrecargables, un 44%.

Entre los cero emisiones, el preferido por los usuarios españoles fue el Niro, un SUV de 4,37 metros de longitud del que Kia matriculó un total de 223 unidades. La versión a baterías del modelo del fabricante coreano está disponible en el mercado desde 32.500 euros con el propulsor de 136 CV. El tope de gama ofrece 204 caballos de potencia y cuesta 39.000 euros.

Kia

El podio de los eléctricos puros más populares lo completaron el Mini, con 122 unidades, y el Hyundai Ioniq 5, con 102. Cerraron el ‘top 5’ el Kia EV6 y el Hyundai Kona.

Otro coche con carrocería SUV, el Peugeot 3008 fue el híbrido enchufable más vendido en enero, con 311 unidades, un 50,97% más que en el mismo periodo de 2021. En el ranquin de ventas de estos modelos que poseen una batería de mayor capacidad y se pueden cargar enchufando el coche a una fuente externa de energía eléctrica, ocupó la segunda plaza el Mercedes-Benz GLC, seguido del Audi Q3, del Volvo XC40 y del Mercedes-Benz GLE.

Alberto_Martinez

Toyota, por su parte, fue globalmente la marca más vendida en el mercado nacional en enero gracias a su liderazgo entre los híbridos autorrecargables. El Corolla, el CH-R y el nuevo Yaris Cross ocuparon los tres primeros puestos del podio en su categoría.

La normativa medioambiental europea y el esfuerzo de los fabricantes por ofrecer una gama cada vez más amplia de modelos son hoy los principales vectores para hacer del eléctrico puro un coche verdaderamente popular. El proceso, no obstante, avanza lento y pese a los altos porcentajes de ventas, el volumen real sigue siendo escaso, con una penetración en el mercado inferior al 3%.

Hyundai

Con solo 23.889 vehículos a pilas matriculados en 2021 en España, el Gobierno apuesta, sin embargo, por dar un salto de gigante en 2030 para que haya cinco millones circulando por el país que contribuyan a la reducción del 55% de los gases de efecto invernadero prevista para entonces. Hoy, según Ganvam, la patronal de los vendedores de vehículos, se mueven por la red viaria nacional unos 150.000 automóviles eléctricos puros. Para lograr el objetivo del Ejecutivo, las ventas habrían de crecer en un futuro próximo de forma exponencial, algo que prevén sucederá a partir de 2025.

El eléctrico no coge vuelo

De momento, las ventas del coche eléctrico, fundamentalmente urbano, no acaban de coger vuelo.

Varias son las razones. La primera de ellas hay que buscarla en el precio. Los vehículos eléctricos son caros, bastante más que cualquier modelo de similar potencia y prestaciones de combustión. Solo el Dacia Spring, un SUV pequeño 100% eléctrico, cuesta menos de 20.000 euros. El más vendido en el mercado nacional durante 2021 fue el Tesla Model 3 –2.853 unidades–, el modelo más barato del fabricante de Estados Unidos que se ha convertido a nivel internacional en un emblema de la descarbonización de la movilidad. El precio de esta berlina de 4,69 metros de longitud, dotada de un interior minimalista y frío, arranca en los 47.000 euros.

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Menos sofisticado, pero más asequible, el Renault Megane E-Tech eléctrico, que inicia su venta estos días, arranca con un precio de 35.200 euros. En 2021, el coche más vendido en España fue el Seat Arona, de combustión, con un precio desde 21.000 euros.

Además, ni las ayudas del plan Moves III ni la escasez de puntos de recarga en la red de carreteras –que dificultan los viajes largos– son factores que animan a los conductores a comprar un eléctrico.