Antes de que concluya la actual legislatura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el director general de Tráfico (DGT), Pere Navarro, ha anunciado que pretende introducir una serie de modificaciones en el Reglamento General de Conductores, con la aprobación de un nuevo Real Decreto, que afectarían, entre a otras cuestiones, a la obtención del permiso de conducir, y que podría entrar en vigor a partir del 1 de julio de 2019.

Nuevas medidas

De aprobarse esta reforma, la formación teórica para la obtención del permiso de conducir constará de ocho horas de clases presenciales en la autoescuela, además de las complementarias que el aspirante decida realizar por su cuenta. En las lecciones obligatorias se recalcarán temas de especial trascendencia como son los colectivos vulnerables, los factores de riesgo, las distracciones al volante y el uso de los sistemas de seguridad, e incluirán testimonios reales de víctimas de accidentes para concienciar a los estudiantes. Por otro lado, los exámenes teóricos contarán con medios audiovisuales, como vídeos, sobre los que se realizarán preguntas concretas a los aspirantes. Además, los errores que se cometan en las respuestas no podrán superar el 10% de las preguntas. El porcentaje actual es del 20%. En el caso de las pruebas prácticas, quienes hayan suspendido el primero de estos exámenes tendrán que esperar un mínimo de 15 días para volver a intentarlo. Tras el segundo suspenso, el plazo será de 30 días, y en los consecutivos deberá haber un margen mínimo de 20. Entre intentos, el alumno deberá recibir, al menos, cinco clases prácticas más.Por último, y una vez obtenido el permiso B, este servirá para el manejo de más vehículos. A partir de la entrada en vigor del nuevo reglamento, los conductores con dos años de antigüedad en el carné podrán conducir vehículos de mercancías de entre 3.500 kilos y 4.250 kilos.