Clio es el nombre del pequeño utilitario de Renault, que actualiza la versión de 2013 con algunos cambios de diseño y novedades en los motores para seguir estando al día.

Con más de 25 años en la calle y 30 millones de unidades vendidas en todo el mundo –uno de ellos en Europa–, el modelo francés es uno de los más populares de Renault.

El Clio, con cinco puertas y cinco plazas, es un coche urbano, pero que estira su carrocería hasta los cuatro metros de longitud, que le permiten también viajar en carretera. Para quienes necesiten más espacio, hay una versión familiar que se llama Sport Tourer, más larga (4,26 metros de longitud) y también con más maletero para la carga. Y también algo más cara: entre 600 y 700 euros, aproximadamente. El Clio tiene un maletero de 300 litros.

Por fuera, respecto a la versión de 2013 los cambios más importantes se pueden ver en la parte frontal, donde Renault ha modificado la imagen de la parrilla inferior del paragolpes, ha colocado unos nuevos faros antiniebla, y rediseñado sus juegos de luces así como la rejilla que rodea el logo del fabricante francés.

En el interior, también ofrece pequeños cambios. Hay ahora materiales más blandos y con mejor aspecto. La calidad es buena.

La gama de motores está compuesta por tres de gasolina –1.2 75 CV, TCe 90 CV y TCe 120 CV– y tres diésel –dCi 75 CV, dCi 90 CV y dCi 110 CV–. Hay, también, dos versiones deportivas, R.S. y R.S. Trophy, con motores de gasolina de 200 y 220 CV, dos auténticas balas.

Por dentro, desde la pantalla táctil, de 7 pulgadas integrada en el salpicadero, se puede controlar la navegación con el sistema Tom Tom, el bluetooth para conectar el teléfono o para escuchar música en streaming, ver la cámara de marcha atrás y la función Driving Eco2, que da información al conductor sobre su tipo de conducción y le ofrece consejos para mejorar su consumo.

La unidad de pruebas de HERALDO incorpora el sistema easy park assist que ayuda al conductor en las maniobras de aparcamiento. ¿Cómo funciona? El conductor empieza por seleccionar el tipo de estacionamiento que desea: en línea o en batería. Cuando el vehículo circula por debajo de 30 km/h, el sistema detecta cualquier plaza disponible adaptada al tamaño del coche. Una vez detectada la plaza, el sistema calcula y se encarga de la trayectoria del vehículo: el conductor no necesita actuar en el volante; solo se ocupa de la aceleración, del freno y del cambio de marchas.

El motor diésel de 90 CV asociado al cambio automático de doble embrague, de seis velocidades es más que suficiente para mover el coche y más que dotado para salir de la ciudad a la carretera.

El nuevo Clio tiene un precio básico que arranca en los 12.850 euros, sin incluir descuentos, para la versión gasolina de 75 CV. El diésel más económico tiene un precio que empieza en los 14.900 euros.

En resumen, el Clio es un utilitario práctico, bien dotado, que, si no se necesita mucho espacio, también nos sirve para viajar.

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