Mazda MX-5, un deportivo de leyenda

Es el coche del verano, un deportivo biplaza y descapotable diseñado para disfrutar de la carretera. Nacido en 1989, este ‘roadster’ ágil y divertido llega al mercado con una nueva versión tras un millón de unidades vendidas.

El Mazda MX-5, en una plaza central de la Universidad San Jorge de Zaragoza.
El Mazda MX-5, en una plaza central de la Universidad San Jorge de Zaragoza.
Guillermo Mestre

Es el coche del verano, un descapotable elegante, joven y divertido. Nació en la planta de Ujina nº 1, en Hiroshima (Japón), en abril de 1989, como un deportivo biplaza con techo de lona y un pequeño hueco trasero para el equipaje y hoy, 27 años después, con los oportunos retoques estéticos que actualizan su figura y con importantes novedades mecánicas y tecnológicas, el Mazda MX-5 sigue en la carretera haciendo de la conducción un juego, una diversión, puro entretenimiento.


Ponerse al volante de este ‘roadster’ –uno de los más vendidos de todos los tiempos– es una fiesta, especialmente en verano cuando se puede llevar a cielo abierto, con su capota de lona guardada, que se pliega a mano en un proceso que apenas exige esfuerzo y tiempo.


En el mercado, el MX-5, al margen del Fiat 124 Spider que es en esencia el mismo coche que el Mazda, tiene entre sus adversarios a coches como los BMW Z4, Mercedes-Benz SLK o Audi TT Roadster. Todos ellos, no obstante, se encuentran en un nivel superior, tanto en prestaciones como en precio. No es, entre todos, ni el más rápido ni el más deportivo, pero sí ofrece una adecuada relación entre precio y calidades y es el más asequible: sin incluir descuentos ni promociones, hay un MX-5 de 131 caballos de potencia, acabado Style por 25.000 euros.


Por fuera, la nueva versión del deportivo japonés ofrece un equilibrio perfecto entre la tradición de sus casi 30 años de historia y su diseño contemporáneo. Su perfil bajo, ancho y musculoso llama la atención y provoca las miradas en la calle, más si cabe en su configuración descapotable.


El interior ofrece un habitáculo acogedor y confortable, pensado y diseñado para el conductor.


El nuevo MX-5 –en el mercado desde finales de 2015– mide 3,915 metros de longitud, por lo que es más corto que cualquiera de las versiones precedentes y, sobre todo, es hasta 100 kilogramos más ligero que el modelo anterior.

Dos motores, ágiles y ligeros

El deportivo de Mazda tiene el motor delante y la tracción trasera. Equipa dos propulsores, un 1.5 y un 2.0, ambos de gasolina, que rinden 131 y 160 caballos de potencia, respectivamente. La versión del 1.5 , con una cifra de consumo medio de seis litros a los 100 kilómetros, es más que suficiente para mover con alegría, rapidez y agilidad a este ‘roadster’ de tacto fino y suave que responde con soltura al acelerador, una de las virtudes del fabricante nipón. Ambas opciones montan cambio de velocidades manual.

El MX-5 se presenta con cuatro niveles de equipamiento: Style, Style+, Luxury y Luxury Sport. Sus precios van desde los 25.000 euros del 1.5 Style a los 30.600 del 2.0 de 160 caballos y terminación Luxury con el pack sport incluido.


De serie en todas las versiones, el nuevo Mazda incorpora una pantalla independiente de siete pulgadas, situada en el salpicadero, con información relacionada con la comunicación y el entretenimiento. El sistema de conectividad a través de smartphone MZD Connect puede proporcionar acceso a internet dentro del vehículo.


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