Automoción

Mayor calidad y confort

El nuevo Toyota Avensis llega cargado de novedades estilísticas y con mejoras en los motores, entre ellas las que permiten que la eficiencia sitúe las emisiones en niveles impositivos favorables. Se lanza con carrocerías sedán y Cross Sport; con dos motores de gasolina (de 147 y 152 cv) y tres niveles de potencia en diésel (124, 150 y 177 cv).

Mayor calidad y confort
Mayor calidad y confort

El nuevo Toyota Avensis supone una mejora en cuanto a amplitud, funcionalidad y eficiencia de combustible, respecto al modelo vendido hasta la fecha. Presenta un diseño exterior más refinado, así como mejoras interiores en la calidad de los acabados, el confort y los niveles de ruido, vibración y aspereza. La nueva estructura de versiones ofrece una relación calidad/precio más competitiva. Además, Toyota introduce Touch & Go Plus, un avanzado sistema multimedia asequible. Con dos tipos de carrocería, tres motores diésel y dos de gasolina, tres transmisiones y tres acabados, el nuevo Avensis ha sido concebido a la medida del mercado europeo.


La variante más vendida de la gama de cinco motores del Avensis, el 2.0 D-4D turbodiésel, ha sido revisada e incorpora mejoras considerables en el consumo de combustible y las emisiones de CO2. Dado que el umbral impositivo en casi un tercio de los países europeos está fijado en 120 g/km, los 119 del motor 2.0 D-4D permiten disfrutan de generosas exenciones fiscales, tanto a clientes como a flotas.


Diseñado, creado y fabricado en Europa, el Avensis se lanzó por primera vez a finales de 1997 y, desde entonces, se ha consolidado firmemente en el segmento D europeo.


Tanto la versión sedán como la Cross Sport son solo 15 mm más largas que sus predecesoras, pero se han rediseñado extensamente, confiriéndole un aspecto más elegante y atlético.


Este coche representa la primera expresión del nuevo lenguaje de diseño de Toyota, basado en dos pilares clave: el diseño frontal inspirado en el concepto Under Priority (Prioridad Inferior), que incorpora una abertura de rejilla trapezoidal, que centra la atención en la parte baja del vehículo y aporta un aspecto más distintivo y firme; y un enfoque de lo que Toyota denomina Imagen Potente, con un estilo claro y muy expresivo.


Así, el frontal, más refinado, transmite la inconfundible nueva imagen de la última generación de la familia Toyota. Cabe destacar dentro de esa nueva dirección que toma el diseño, el cambio de proporciones de las rejillas superior e inferior, con un mayor énfasis en el tamaño de la segunda, para conseguir una imagen más dinámica.


Bajo la entrada de aire de arriba, que ahora es más grande, el paragolpes presenta una potente sección central saliente que permite colocar una gran entrada de aire, lo que da al vehículo una presencia más amplia y asentada.


En combinación con estos detalles del concepto Imagen Potente, los faros antiniebla integrados (en los extremos del paragolpes) confieren un aspecto más cercano al suelo.


Los faros delanteros, más estrechos y expresivos, enfatizan las proporciones. Además, ahora incorporan luces de circulación diurna, que refuerzan el estilo frontal.


En la parte posterior, cuenta con un paragolpes de nuevo diseño, que incorpora una defensa central. Por otra parte, el diseño cromado del embellecedor de la matrícula, más estilizado, da un nuevo toque de elegancia.


Además del turbodiésel 2.0 D-4D de 124 cv revisado, la gama de motores comprende una unidad 2.2 D-4D de 150 cv (con DPF), una variante 2.2 D-4D de 177 cv con DPNR y una selección de motores de gasolina de 1,8 litros, con 147 cv, y de 2,0 litros, con 152. Todos los motores se combinan con transmisiones manuales de seis velocidades. El diésel de 150 cv puede llevar una automática y los dos de gasolina la Multidrive S, que incorpora levas de cambio en el volante.