PROTOTIPO

El urbanita del mañana

El coche para la ciudad del mañana es un biplaza, propulsado con electricidad y que se carga con un sistema de inducción. Eso es al menos lo que propone Audi con su Urban Concept.

El fabricante alemán de los cuatro aros sigue avanzando por nuevos caminos con el prototipo técnico Audi Urban Concept, un vehículo para núcleos urbanos con una distribución de asientos 1+1. Aunque tiene cuatro ruedas, este ‘showcar’ de propulsión eléctrica no encaja en ninguna de las categorías automovilísticas actuales. El Urban Concept solo pesa 480 kilos y combina elementos de un coche de carreras, de un ‘roadster’, de un vehículo recreativo y de un coche urbano, dando vida a un nuevo concepto radicalmente innovador. Sin duda alguna, posee todo el potencial para ser pionero de una nueva movilidad.


La pregunta que dio origen a este proyecto fue: "¿Cuánto coche hace falta para crear un modo completamente nuevo de placer de conducción y de movilidad urbana?". El estudio de diseño ha estado presidido durante toda la fase de desarrollo por la maqueta de un planeador, símbolo de construcción ligera, de eficiencia y de reducción, es decir, del principio menos es más.


El resultado es un vehículo que no tiene cabida en ninguno de los estereotipos actuales, un coche que da un nuevo significado al término placer de conducción y que está completamente libre de todo prejuicio. El Audi Urban Concept se centra en la esencia pura de la conducción, transmitiendo el concepto de libertad a un nivel superior. Sin embargo, ofrece también el confort y la seguridad de un automóvil cerrado, por lo que es muy superior a cualquier escúter. El prototipo técnico, con su esbelta carrocería y unas ruedas fuera de la misma, es moderno, deportivo y sorprendentemente cómodo.


En la cabina del Audi Urban Concept caben dos personas, con un asiento del acompañante ligeramente desplazado hacia atrás, respecto al del conductor. El techo, que se puede abrir deslizándolo hacia atrás, presenta una novedosa solución que incrementa el placer de conducción, ya que la cúpula puede permanecer abierta cuando hace buen tiempo y permite una ventilación rápida.


El acabado del ‘showcar’ presume de una perfección que es ya una obligación en Audi. Y su tecnología interna refleja toda la competencia de la marca, en particular en lo que respecta a la construcción ultraligera.


Con este modelo, la marca de los cuatro aros inaugura un segmento de vehículos completamente nuevo y de categoría ‘premium’. Al mismo tiempo, Audi completa su oferta de automóviles eléctricos para el futuro, que abarca desde este hasta el deportivo de alto rendimiento R8 E-tron. Este vehículo facilita, literalmente, el acceso a la movilidad eléctrica.


El prototipo técnico está dirigido a aquellas personas interesadas en la tecnología y en las nuevas vías de la movilidad, sin importar su edad o su estatus. Y muy especialmente a ese público urbano cuyo estilo de vida se adapta a su moderno concepto y al placer de conducción que este conlleva, así como a un posible sistema de ‘leasing’ de lo más innovador.


El diseño posee determinadas raíces históricas que se remontan a los bólidos de la Auto Union de los años treinta. El prototipo técnico de color Blanco Eléctrico efecto Perla mide 3.219 mm de largo y 1.678 de ancho, pero solo 1.189 mm de alto; y en su carrocería todas las líneas empujan hacia delante.


La franja acristalada es extremadamente plana, mientras que la línea del techo se desliza hacia abajo, formando una cuña, a la vez que la ventanilla lateral dibuja un trazo ascendente. La típica línea de cintura de Audi realza esta zona de la carrocería.

El ‘blade’ recto e inclinado hacia delante que se encuentra delante de la rueda trasera acentúa la perspectiva lateral. El contorno de color rojo Speed actúa como un arco antivuelco y recuerda al deportivo R8. En la parte inferior, los flancos de la carrocería se ensanchan. Esto aumenta la superficie del suelo, lo que tiene dos funciones: genera empuje descendente a altas velocidades y sirve para cargar la batería mediante inducción, un proceso especialmente cómodo.