Más de 15 parques eólicos estarán en construcción antes del próximo verano en Aragón

La decidida apuesta del Gobierno de Aragón por las energías renovables empieza a tomar cuerpo tras dos años de gestión y contactos con el sector. Hasta el punto de que en el primer semestre del próximo año comenzará la construcción de más de una quincena de parques eólicos. Esto se traducirá en una inversión superior a los 352 millones de euros, según los cálculos de las propias compañías que los impulsan, las aragonesas Forestalia, Grupo Jorge y Brial, además de la energética nacional Gas Natural Fenosa. Y a estas cuatro empresas se sumará dentro de unos meses Gamesa tras haber obtenido esta semana la declaración de interés autonómico para la ejecución de otro cuatro parques.

El Gobierno de Aragón ultima la tramitación de los proyectos, que podrían lograr la autorización entre finales de año y el primer trimestre de 2018. La Dirección General de Energía ha tenido que reforzar su personal ante la avalancha de expedientes, ya que los citados parques son solo un mínima parte de los que está gestionando. Para hacerse una idea, las citadas 15 instalaciones suman unos 400 megavatios y los 129 proyectos que se encuentran en distintos grados de tramitación en la DGA representan, en total, 3.505 MW. Si finalmente se desarrollan, se duplicará con creces la actual capacidad instalada en Aragón.

Los nuevos parques se concentran en la provincia de Zaragoza, donde las compañías tienen asegurado el número de horas de viento necesarias para garantizar la producción eléctrica. Otro de ellos se ubicará en los términos municipales de Azaila y Vinaceite (Teruel). Si se cumplen las previsiones, estarán evacuando energía a la red a mediados de 2019.

La mayor apuesta corresponde a Forestalia, que espera que sus planes empiecen a tomar forma este invierno. A la compañía fundada hace seis años por Fernando Samper le han adjudicado 1.500 megavatios en las subastas ministeriales y trabaja en el desarrollo de los proyectos de 44 parques eólicos, en alianza tecnológica con General Electric y el respaldo del mayor fondo de inversiones del mundo, Blackrock. El primer paso lo dará con la construcción de entre cinco y siete parques, que representan entre 100 y 180 megavatios, repartidos por las comarcas de Belchite, Cariñena y Daroca.

Forestalia tendrá que correr, ya que los plazos concedidos por el Ministerio de Industria en las subastas obligan a las empresas a desarrollar los proyectos en un tiempo récord para no perder los avales millonarios que depositaron. Deberán estar listos entre finales de 2019 y marzo de 2020, todo un reto cuando se deben desarrollar tantas instalaciones a la vez.

La DGA ha puesto su granito de arena con la declaración de interés autonómico de 34 de sus 44 parques, lo que recorta los plazos de tramitación a la mitad. Otro siete están pendientes de lograrlo y los tres restantes se gestionan en la Administración central al superar los 50 MW de potencia, tal y como explicó un portavoz. En todos los casos, se construirán en Aragón, lo que implica una inversión de 1.350 millones.

Brial, también espera lograr los permisos de aquí al primer trimestre de 2018 para acometer junto a sus socios, también aragoneses, cinco parques en el entorno de Magallón que tendrán una potencia de 150 megavatios. Antes deberá cerrar la financiación, para lo que las entidades financieras quieren ver primero los permisos, como explicaron fuentes de la compañía. En una situación muy similar se encuentra Grupo Jorge. Su objetivo es construir tres parques que se repartirán entre los términos municipales de Pedrola y Plasencia de Jalón, con una potencia de 82 megavatios. En su caso, los proyectos podrían contar con el aval medioambiental del Inaga en noviembre y con la autorización administrativa antes de Navidad. Pero las máquinas no podrán comenzar a trabajar hasta que se cierre la financiación, cuya negociación está "muy avanzada", según fuentes de la empresa.

En el caso de los dos parques de Gas Natural, el de Fréscano (24 MW) lo comenzará a construir a principios de 2018 en los términos municipales de Fréscano, Agón, Bisimbre y Magalllón. Mientras, las obras del de San Agustín (35 MW) arrancarán a finales del próximo año entre Almochuel, Azaila y Vinaceite.

Ventaja competitiva

La consejera de Industria, Marta Gastón, destacó la ventaja competitiva que supone para Aragón el hecho de ofrecer a las empresas, no solo seguridad jurídica tras haber desatascado el bloqueo judicial de los concursos eólicos, sino la tramitación de los proyectos en la mitad de tiempo gracias a la declaración de interés autonómico. "Los inversores se la juegan y esto nos ha puesto por delante de otros territorios", aseguró satisfecha por convertir en un sector estratégico las energías renovables.