Zapater, José Enrique, Cani... este lunes, también Ángel Rodríguez mostró en rueda de prensa su apoyo a Luis Milla, el cuestionado entrenador del Real Zaragoza que estuvo a punto de ser destituido en la noche de este domingo por los directivos de la SAD. El delantero centro titular fue, en la mañana del lunes, el primer portavoz de la plantilla tras el nuevo fracaso vivido ante el Elche en La Romareda, esa derrota por 1-3 que ha llevado la desconfianza a todos los rincones del zaragocismo.

"Si él está con nosotros a muerte, nosotros también estamos a muerte con él. Ahora mismo es el entrenador que va a sacar esto adelante. Nosotros, estamos encantados con su forma de trabajar y con la forma de hacer las cosas. Aunque ayer (por el partido ante el Elche), es verdad que pareció que nos da igual y en la primera parte no reflejamos esto. Pero, como ya dije la semana pasada, repito, estamos a muerte con él", subrayó con énfasis Ángel en ese sentido. 

"Estamos con el entrenador. Y, los jugadores, tenemos muchas ganas de poder revertir la situación", apostilló en el breve pasaje de su comparecencia en el que hizo referencia al asunto más candente de la actualidad zaragocista en el arranque de esta semana pos pilarista.

Como ya quedó de manifiesto la semana pasada, los pesos pesados de la caseta han hecho piña con Milla. No desean que el proyecto descarrile tan temprano, cuando solo se llevan disputadas 10 jornadas, apenas en el segundo mes de la temporada. Pero, es evidente, la acumulación de malos resultados, el despeñamiento paulatino en la clasificación y, lo que es más preocupante, el pésimo juego y los síntomas de candidez que el equipo manifiesta sobre el campo cada partido, transcurren justo en dirección contraria a ese posicionamiento de los jugadores veteranos a favor de su técnico.

El fútbol es tozudo y, si no surgen los triunfos y mejora la actitud de equipo sobre el césped, la situación ha llegado a un punto de fractura. La plantilla ya sabe que Milla tiene una prórroga hasta el partido del próximo domingo en el campo vallisoletano de Zorrilla, su última oportunidad de reconducir los problemas manifiestos. "La Segunda División es muy larga y, si ganas dos partidos seguidos, todo se arregla. El Valladolid, nuestro rival ahora, es un ejemplo. Ha estado cinco jornadas seguidas perdiendo y ahora que ha ganado dos consecutivos ya parece que va a subir, ¿no?", ha razonado Ángel para pedir "paciencia" en una situación que, no obstante, ha reconocido y calificado como "complicada" dentro del vestuario del Real Zaragoza.