Los empresarios y directivos aragoneses muestran un moderado optimismo sobre las previsiones para la economía en la comunidad, aunque son más prudentes que la media nacional. Así, un 80% creen que se mantendrá o mejorará la situación económica (un 40% en cada caso), mientras que a nivel nacional el optimismo llega a un 94% (50% y 44%), según se desprende del informe Perspectivas España de la consultora KPMG.

En un entorno de incertidumbre a nivel internacional y alta volatilidad en los mercados, la mayoría de los encuestados (un 59%) consideran que la situación actual de la economía española es "regular, mientras que un 32% la califican de "buena", apunta la encuesta, realizada entre más de un millar de directivos. En el caso de los aragoneses, su opinión es también un poco menos optimista con respecto a la situación económica de su comunidad, con un 50% de los encuestados que la perciben como regular y un 30% que la califican como "buena".

"En un mundo global y cada vez más interconectado, la evolución de la economía española estará claramente influenciada por lo que suceda más allá de nuestras fronteras. Pese a que las proyecciones son positivas, el escenario global obliga a ser cautos", señala Juan José Cano, socio responsable de Pymes y Empresa Familiar de KPMG en España.

La duodécima edición de este informe confirma el cambio de tendencia en el sentimiento del tejido empresarial español. Si hasta 2013 más del 80% de los encuestados tenían una visión negativa de la situación económica, a partir de aquel año las proyecciones más optimistas han ido aumentando, destacan.Transformarse y exportar

Las prioridades de las empresas para este año están encabezadas por la transformación de la compañía, referida a los cambios en la estructura, procesos, funciones y personas (23%), seguida de la innovación y la tecnología (apuntada por un 20%), el desarrollado de nuevos productos (19%) y la expansión y crecimiento internacional (un 16%).

El informe recoge que el 75% de las compañías tienen presencia en el extranjero y el 50% afirma que su presencia internacional aumentará durante 2016.

La situación política preocupa a las empresas, ya que tres de cada 10 encuestados señalan este factor como principal amenaza para sus negocios. Las tensiones geopolíticas y el debilitamiento de la eurozona son considerados también como los principales factores de riesgo.

En las peticiones a la Administración, las empresas aragonesas son las que encabezan con un 30% la reducción de la burocracia, por encima del 22% de media. Le sigue el fomento de la educación, formación y desarrollo de competencias (23%) y una reforma fiscal (23%).

Por sectores, los más pesimistas son el de infraestructuras y el financiero.