Soria ha ganado más de 800 altas a la Seguridad Social en el último año si bien la generación de empleo transita a varias velocidades, lo que acrecienta las desigualdades provinciales. El empleo se focaliza en los principales municipios, mientras las zonas más rurales aguantan el tirón, en gran medida gracias a la actividad agraria, sin experimentar demasiado crecimiento.

La Seguridad Social contabiliza al término de abril 36.539 ocupados, frente a los 35.725 de hace justo un año. Son 814 más.

Por municipios, 67 han ganado trabajadores en los últimos doce meses, lo que representa el 36%, mientras que 55 (30%) han visto disminuir La población ocupada. Los 67 restantes mantienen sus niveles, de los que 28 tienen menos de cinco empleados, nivel tan bajo que el Ministerio de Trabajo ni siquiera ofrece el dato exacto en su estadística.

En términos generales, los municipios más poblados han mejorado sus niveles de cotizantes. Esto quiere decir que ganan más trabajo del que pierden. Los pueblos medianos se comportan de manera muy cambiante y los más pequeños, con escaso volumen de actividad, pierden o ganan con variaciones mínimas.

La capital provincial se sitúa a la cabeza en la generación de puestos de trabajo. Ha sumado 422 en el último año, lo que significa el 52% de todas las altas contabilizadas en la provincia durante el ejercicio analizado. También destaca, una vez más, Ólvega, donde la cifra de trabajadores ha crecido en 206 en el último año. Por detrás se sitúa Almazán, con 69 más. Estas tres localidades aglutinan 697 de las 814 nuevas afiliaciones.

Aunque a menor medida también sobresalen Garray y Golmayo, que aumentan su cifra de trabajadores en 30. Y más todavía San Leonardo, con 42 nuevos. El Burgo de Osma ha sumado 17.

Los principales descensos se registran en San Esteban de Gormaz, que pierde 44 trabajadores, Molinos de Duero (12), Berlanga y Duruelo (once) y Navaleno (ocho).

La cifra de trabajadores también descubre el gran desequilibrio de la actividad que sufre la provincia, con pocos puntos como motores económicos y además muy localizado. En este sentido, la capital suma 19.424 de los 36.539 trabajadores que en total cotizan. Es decir, el 53% de las personas que trabajan en la provincia lo hacen en empresas con sede en la capital.

Le sigue Ólvega, donde trabajan 2.232 personas. Que en una localidad con 3.700 empadronados haya más de 2.200 trabajadores pone de manifiesto el tremendo éxito de Ólvega en su política industrial, encabezada por Emiliano Revilla. De ahí que Goyo Alonso, portavoz de Soria ¡Ya! siempre ponga como ejemplo de buen hacer al empresario y al pueblo.

Supera en población ocupada a Almazán (1.972), El Burgo de Osma (1.753), Ágreda (1.099) y San Esteban (1.056), las únicas junto a la capital que superan el millar de cotizantes. Y estas seis localidades, con 27.536 afiliados, acaparan el 75% de los ocupados sorianos. En cambio, 163 localidades, el 90% no llegan a los 100 trabajadores.