La EBAU acaba con polémica e indignación por la prueba de Historia

La Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), nueva tras la reciente reforma de la LOMCE, ha concluido este jueves en Castilla y León después de tres jornadas de exámenes con la indignación generalizada entre los alumnos por la polémica en torno al ejercicio de Historia de España, el primer día.

Las preguntas del examen de Historia de España, obligatorio para todos los estudiantes y celebrado el 13 de junio, causaron la sorpresa e indignación de los estudiantes que se presentaron en el distrito de Valladolid -Palencia, Segovia, Soria y Valladolid- porque entendían que algunas cuestiones habían quedado excluidas por un acuerdo de los coordinadores del examen.

En las semanas previas a la prueba existieron dudas sobre si el temario de Historia de España constaba de 97 ó de 18 epígrafes, una situación cuyo origen se remonta al 23 de diciembre, cuando el Ministerio de Educación aprobó un listado de 97 de los cuales deberían salir las preguntas del ejercicio, según las explicaciones ofrecidas por el consejero de Educación, Fernando Rey.

Fue el 31 de marzo cuando el grupo técnico de esa asignatura, integrado entre otros por los cuatro profesores representantes de las universidades públicas (Burgos, León, Salamanca y Valladolid), acordaron que las preguntas que finalmente se incluyeran en el examen se elegirían entre dieciocho temas, según la versión aportada por el consejero.

Esta decisión, que debía haber quedado en el ámbito interno de los examinadores, al parecer salió de ese círculo debido a que uno de los cuatro coordinadores, según el consejero, "filtró" a algunos institutos del distrito vallisoletano esa decisión del grupo técnico de reducir el temario, lo cual trascendió entre los alumnos través de las redes sociales.

A raíz de esta situación, la Consejería se puso en contacto con el grupo técnico de materia afectado para que tomaran de forma autónoma la decisión que consideraran oportuna, a la vez que emitió el 1 de junio un comunicado para desmentir lo que denominó como "rumores" acerca del temario de Historia, pero sin aclarar a qué se refería.

Finalmente, el examen incluyó los 97 epígrafes entre el desconcierto del alumnado del distrito de Valladolid y la indignación debido a su posible incidencia en las calificaciones y su repercusión en la nota necesaria para poder cursar los grados deseados.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Rey ha considerado que esta "filtración" es un hecho "muy grave", y anunciado el estudio de medidas legales, disciplinarios o penales, contra el coordinador del distrito universitario de Valladolid en el examen de Historia de España.

Rey ha descartado la repetición o anulación del examen del pasado martes por estas circunstancias y, sobre los posibles recursos administrativos o judiciales de alumnos y sus familias, ha puesto en duda que puedan prosperar al considerar que su departamento ha actuado correctamente.

A las quejas, críticas y peticiones de comparecencia en las Cortes de Castilla y León para que el consejero explique la situación, se han unido hoy las de las asociaciones de padres y madres de alumnos de centros públicos de Castilla y León (Confapacal) y de la Federación Autónoma de Asociaciones de Estudiantes (Fadae).

Ambas han recomendado a los afectados que presenten reclamaciones en bloque una vez conocidas las calificaciones, a partir del 22 de junio, y han solicitado a la Consejería de Educación "una solución real, ya sea la anulación de dicho examen o al repetición de este, siempre buscando la opción que más beneficie a los afectados por un problema que ellos no han causado y por el cual deben pagar".