La Asamblea Nacional aprobó ayer una nueva ley que facilita al Gobierno de Hugo Chávez intervenir las entidades financieras, lo que despertó un fuerte rechazo de la oposición, que consideró esta normativa como "la nacionalización de la banca" venezolana. La Ley de Instituciones del Sector Bancario fue aprobada como parte de las medidas que está acelerando el Parlamento -controlado por el oficialismo- antes de que la oposición asuma sus escaños en el nuevo período legislativo que comenzará en 2011.

El artículo 8 de la normativa señala que el jefe de Estado venezolano "en Consejo de Ministros podrá acordar la intervención, liquidación o cualquier otra medida que estime necesaria, sobre las instituciones del sector bancario, así como sobre sus empresas relacionadas o vinculadas".

El proyecto promovido por el propio Chávez fue aprobado por mayoría absoluta por todos los congresistas del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y rechazado por la ínfima representación legislativa que tiene la oposición.

A partir de 2011, el panorama legislativo será muy diferente porque la oposición tendrá una amplia representación -con 67 diputados- por primera vez desde 2005, cuando decidió retirarse de las elecciones tras denunciar fraude.

En menos de dos años han sido intervenidas 12 entidades financieras acusadas de supuestas irregularidades. En mayo de 2009, el Gobierno de Chávez concretó la compra por un importe de 750 millones de euros del Banco de Venezuela, filial del Grupo Santander.

Por otro lado, el Gobierno venezolano inició ayer la intervención de más de 20.200 hectáreas, en una operación encabezada por el ministro de Agricultura. La intervención de esos latifundios fue ordenada el pasado 8 de diciembre por Chávez, quien dijo entonces que se trataba de 43 terrenos privados.