CHINA-TÍBET

Representantes de China y del Dalai Lama acuerdan volver a reunirse

Los enviados del líder tibetano Dalai Lama y representantes del gobierno chino acordaron volver a reunirse tras un encuentro en China, aunque Pekín exige "pasos creíbles" para avanzar en las conversaciones, entre ellos dejar de "sabotear" los Juegos Olímpicos.


Según informó la agencia estatal Xinhua, no está claro si con ello quedaron cerradas las conversaciones iniciadas este domingo. Un comunicado señala únicamente que los delegados de ambas partes iniciarán "a su tiempo" otros "contactos y consultas".


Los dos representantes chinos dijeron que los fuertes disturbios ocurridos el 14 de marzo en Lhasa causaron "nuevos obstáculos" para el diálogo con el Dalai Lama, el máximo líder religioso de los tibetanos, que vive en el exilio en India.


Por eso, el gobierno chino espera que el Dalai Lama dé "pasos creíbles" para cumplir con las condiciones para la próxima ronda de negociaciones. Para ello tienen que cejar en su empeño de dividir China, abandonar la violencia y dejar de "sabotear" los Juegos Olímpicos de Pekín, señalaron.


El recorrido internacional de la antorcha olímpica se vio salpicado en las últimas semanas, sobre todo a su paso por ciudades occidentales, por protestas masivas contra el gobierno chino y su represión de las manifestaciones en el Tíbet.


Las conversaciones habían despertado esperanzas de que hubiese una solución al conflicto del Tíbet. El jefe de Estado y del partido de China, Hu Jintao, manifestó cierto optimismo. "Espero que los contactos con los enviados del Dalai Lama tengan un resultado positivo", afirmó a periodistas japoneses desde Pekín.


En medio de la crisis por las manifestaciones antichinas en el Tíbet, la comunidad internacional pedía a Pekín que iniciara un diálogo con el líder espiritual de los tibetanos. Los expertos son escépticos sin embargo acerca de los resultados que pueda tener.


De hecho, a la vez que dijo esperar un avance, Hu reiteró las acusaciones al Dalai Lama y sus seguidores, a quienes instó a demostrar "con hechos" que abandonan sus "actividades separatistas" y la "instigación de la violencia".


El encuentro informal se realizó en Shenzhen, en la provincia de Guangdong, informó el gobierno tibetano en el exilio, con sede en Dharamsala, India. Se trata del primer contacto oficial entre la dirigencia china y los tibetanos del exilio desde el comienzo de los disturbios antichinos en el Tíbet a mediados de marzo.


En un principio, un portavoz aseguró que las conversaciones durarían al menos dos días, por lo que el retorno de los representantes a India no se espera para antes del miércoles.


Según el secretario privado del Dalai Lama, Tenzin Taklha, los enviados no se pronunciarán acerca de las conversaciones mientras estén en China, por lo que habrá una conferencia de prensa como muy pronto a su regreso y tras informar al líder espiritual en Dharamsala acerca del resultado.


Desde hace tiempo estaba prevista una ronda de negociaciones, pero fue pospuesta por los chinos sin dar explicaciones. Desde 2002 ha habido seis encuentros entre ambas partes, que no produjeron avances sustanciales.