LA AMENAZA DE TEHERÁN

Problemas técnicos frustran los planes militares de Irán, según expertos británicos

El Gobierno de Teherán lanza un nuevo cohete al espacio y anuncia la fabricación de tres satélites de telecomunicaciones.

Los problemas técnicos frustran las ambiciones armamentísticas de Irán, aunque pronto tendrá la capacidad para construir piezas de armamento atómico, según afirmó ayer el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS). Este, que elaboró uno de los informes decisivos para afirmar que el régimen del presidente iraquí Sadam Husein tenía un arsenal de destrucción masiva, presentó en Londres su informe anual sobre 'Equilibrio militar', que presta especial atención a la tensión en Oriente Medio y a cómo Internet cambia las políticas de defensa.

 

El documento indica que "las centrifugadoras de gas (que se emplean para el enriquecimiento de uranio) muestran signos de deterioro" y que aunque "se han instalado más", en la actualidad "hay 1.000 menos produciendo uranio enriquecido que en mayo pasado".

 

No obstante, el director del IISS, John Chipman, destacó que "las reservas de uranio enriquecido de Irán siguen aumentando y pronto serán suficientes, cuando se haya conseguido avanzar en el enriquecimiento, para la capacidad de dos piezas de armamento".

 

Este 'think tank', con vínculos a los Gobiernos de EE. UU. y el Reino Unido, expresa su "preocupación no solo por el programa nuclear de Irán, sino también por sus esfuerzos de desarrollo balístico", lo que ha derivado en que los Estados del Consejo de Cooperación del Golfo hayan impulsado sus programas de defensa.

 

Esto se ha traducido en que países como los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí durante el año 2008 invirtieran 9.700 y 8.700 millones de dólares (6.970 y 6.252 millones de euros), respectivamente, en adquirir de Estados Unidos antimisiles Patriot y otro equipamiento militar avanzado. Para el IISS, este escalada militar por parte de los países aliados de EE. UU. en la región no es una provocación hacia el régimen de Teherán, sino "un elemento de disuasión" frente a las ambiciones nucleares de Irán, según destacó Mark Fitzpatrick, experto en asuntos de no proliferación armamentística del Instituto.

Fracaso y éxito

En el terreno político, el informe considera que el intento de Obama de tender una mano diplomática al presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, "ha fracasado" en lo que era su objetivo inicial de disuadir a Teherán, pero "ha sido un éxito" para crear un mayor consenso internacional.

 

Irán anunció ayer que ha dado un nuevo paso adelante en su programa aeroespacial con el lanzamiento de un modelo avanzado de su cohete Kavoshgar (Explorador), equipado en esta ocasión con una cápsula especial en la que viajan varios seres vivos. Según la televisión estatal Press TV, las nave partió ayer desde un punto no revelado del país con una rata, dos tortugas y varios gusanos a bordo. Minutos después, Ahmadineyad, inauguró tres nuevos proyectos para la construcción de sendos satélites de telecomunicaciones.