REINO UNIDO

"Nuestro liderazgo será fuerte y estable"

Cameron y Clegg presentan su pacto en el que los 'tories' han cedido cinco ministerios a los liberaldemócratas.

Cameron, a la izquierda, y Clegg saludan juntos desde el 10 de Downing Street, residencia oficial del primer ministro británico.
"Nuestro liderazgo será fuerte y estable"
GEOFF CADDICK/AFP

El nuevo primer ministro británico, David Cameron, lo definió como "un liderazgo fuerte, estable, decidido". El nuevo viceprimer ministro, Nick Clegg, dijo que "no es solo un nuevo Gobierno sino también una nueva política". El alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, lo describió con más humor como "un cruce entre perro dogo y chihuahua".

El Ejecutivo de coalición entre conservadores y liberaldemócratas, formado en pactos negociados en largas reuniones en los últimos días y confirmado en el atardecer del martes, se presentó ayer a plena luz del día. Primero se registró la llegada del nuevo viceprimer ministro y líder de los liberaldemócratas, Nick Clegg, que fue recibido en la puerta del 10 de Downing Street por Cameron. Hubo fotos, apretones de manos, sonrisas y palmadas en los hombros.

Cameron y Clegg presentaron las líneas maestras de actuación de su Gobierno ofreciendo la sensación de que su relación personal es buena, de que están dispuestos a que la coalición dure y de que quieren protegerse mutuamente, con el aliento de estar cambiando la política británica, de los difíciles tiempos que se avecinan, tanto para sus políticas como por las críticas que sufrirán de sus propios correligionarios.

La sintonía personal de ambos se ilustró cuando un periodista preguntó a Cameron si lamentaba que un día, a la petición de que dijera un chiste, repuso: "Nick Clegg". "Bueno...", comenzó el conservador con apuros. "¿Lo dijiste?", le preguntó el liberal. "Me temo que sí". Clegg hizo ademán de marcharse. "¡Vueeelveee!", pidió Cameron cerrando la comedia.

Esa relación personal estará tasada por el desigual papel en el Gobierno. Clegg trabajará en una oficina del Ministerio del Gabinete, anexo al número 10, pero Cameron aclaró que la relación de ambos no se centrará en tener reuniones para aprobar decisiones.

Cesión de carteras

En esta alianza, los dos partidos han hecho concesiones, y mientras que los 'tories' cederán cinco ministerios a los liberaldemócratas -Cambio Climático, el departamento para Escocia, la Secretaría del Tesoro, y Negocios y Banca, más la vicepresidencia-, estos parecen haber hecho los mayores sacrificios programáticos.

Así, han accedido a los planes conservadores de reducir el déficit estatal en 6.000 millones de libras (unos 7.020 millones de euros) con recortes en el gasto público este año -en lugar de esperar a que se consolide la recuperación-. Y han renunciado a su política de conceder una amnistía para regularizar la inmigración ilegal para, en cambio, apoyar la iniciativa 'tory' de poner un tope a la inmigración extracomunitaria.

En Defensa, los liberales han archivado su propuesta clave de no renovar el sistema Trident de disuasión nuclear, aunque se analizará su viabilidad. Y el hasta ahora partido más europeísta ha accedido a la exigencia 'tory' de someter a referéndum toda futura transferencia de competencias a Bruselas y a no adoptar el euro. Los dos partidos, además, han fijado en cinco años la legislatura.