ORIENTE PRÓXIMO

Netanyahu rechaza el tratado antinuclear

El primer ministro cancela su presencia en la cumbre del lunes en EE. UU. alegando que quiere evitar presiones.

El presidente estadounidense Barack Obama abandona Praga para volar a Washington, ayer.
Netanyahu rechaza el tratado antinuclear
SAMUEL KUBANI/AFP

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no participará en la cumbre sobre seguridad nuclear que se celebrará los próximos días lunes y martes en Washington, para frenar cualquier demanda de que Israel se sume al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP).

"En los últimos días hemos tenido información de que hay algunos interesados en aprovechar la cumbre para atacar a Israel y por eso el primer ministro ha decidido no participar", explicó ayer una fuente del Gobierno israelí.

Esa fuente declinó confirmar si se trata de países o de organizaciones internacionales y se limitó a insistir en "interesados en atacar a Israel en relación con el TNP".

La decisión la tomó el jueves Netanyahu tras asesorarse con su equipo, en una reunión a última hora en la que, según el diario 'Yediot Aharon', surgió que varios países árabes y musulmanes también invitados tienen la intención de exigir a Washington la inclusión de Israel en el TNP.

"Deseábamos mucho participar. Nosotros estamos a favor de los principios de la cumbre, que es la seguridad en torno a instalaciones nucleares y evitar que materiales nucleares caigan en manos de terroristas", abundó la fuente en sus declaraciones sobre la supuesta intención de algunos participantes de salirse de este tema.

Israel, al que medios especializados atribuyen capacidad nuclear, guarda desde hace décadas una política de ambigüedad en todo lo relacionado con este tipo de arsenales, que según expertos militares podría alcanzar las 200 o 300 cabezas nucleares.

En el pasado, en relación con las demandas a Irán para que frene su programa nuclear, países vecinos como Egipto y Turquía exigieron que también Israel sea puesto bajo control del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).

Relaciones enfriadas

Analistas locales consideran desde hace varios días que el Gobierno de Netanyahu teme que la demanda vuelva a surgir en Washington y que el presidente estadounidense, Barack Obama, la respalde de alguna manera en momentos en que las relaciones entre los dos gobiernos se han enfriado por el estancamiento del proceso de paz con los palestinos.

En lugar del jefe del Gobierno participará en la cumbre el viceprimer ministro y ministro israelí de Servicios de Inteligencia, Dan Meridor, así como el director de la Agencia Israelí para la Energía Atómica, Shaul Horev, y el asesor de Seguridad Nacional de Netanyahu, Uzi Arad.

La fuente gubernamental explicó que al no asistir Netanyahu "se reduce el nivel de la delegación", pero se negó a especular sobre si con ello Israel podrá evitar que el tema de su arsenal nuclear surja en la reunión.

Israel tiene dos reactores nucleares que fueron construidos a partir de la década de los años sesenta del siglo pasado con la ayuda de los Gobiernos de Francia y Alemania.

El de Nahal Sorek es de pequeña potencia y está destinado exclusivamente a investigación, pero en el reactor de Dimona, según las fotografías que en 1986 entregó el técnico Mordejai Vanunu a un medio británico, se han construido bombas atómicas.

En declaraciones a la cadena de televisión CNN, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU., Mike Hammer, confirmó que había sido informado de la decisión de Netanyahu, y agregó que "Israel es un estrecho aliado" y que esperan "seguir trabajando con él en asuntos vinculados a la seguridad nuclear".

La cita de Washington responde a una iniciativa del presidente estadounidense y reunirá a líderes y delegaciones de 47 países, incluido EE. UU.

La cumbre será una oportunidad para que los 47 países se comprometan a tomar medidas específicas para garantizar la seguridad de todos los materiales nucleares vulnerables en un plazo de cuatro años, dijo Obama a raíz de la presentación de la Revisión de la Postura Nuclear de EE. UU. (NPR) el pasado martes.

Ayer mismo, Obama regresó de Praga a Washington para preparar la cumbre. El presidente estadounidense, que antes de partir se reunió con su colega checo, Vaclav Klaus, abandonó poco antes de las 11.00 Praga, donde el jueves firmó con el presidente ruso, Dmitri Medvedev, un nuevo tratado de desarme nuclear Start que limita a 1.550 las cabezas nucleares para cada país.

El objetivo de la cumbre que empieza el lunes, según afirmó la Casa Blanca, es conseguir medidas y compromisos concretos de los países para garantizar la seguridad de todos los materiales nucleares en un plazo de cuatro años, de modo que se evite que puedan caer en manos de grupos terroristas o de regímenes hostiles.

La nueva estrategia nuclear de EE. UU., que se hizo pública el pasado martes, considera el terrorismo nuclear la gran amenaza de la actualidad.

A la cumbre de Washington han confirmado su asistencia líderes como el presidente chino, Hu Jintao; el primer ministro indio, Manmohan Singh, o el brasileño Luiz Inácio 'Lula' da Silva.

Los mandatarios comenzarán a llegar mañana por la tarde. El lunes, la mayor parte de la jornada se dedicará a reuniones bilaterales, antes de concluir con una cena de trabajo. El martes, los líderes celebrarán dos sesiones plenarias, que concluirán con una rueda de prensa y una declaración final.