RUSIA

Nace la polícia rusa con el apoyo de la Duma

Hasta ahora, las fuerzas de seguridad rusas se llamaban 'militsia', un nombre heredado desde los tiempos de la Unión Soviética.

El presidente ruso Medveded
Nace la polícia rusa con el apoyo de la Duma
EFE

La Duma rusa ha aprobado un proyecto de ley por el que las fuerzas del orden conocidas como 'militsia' desde los tiempos soviéticos pasarán a llamarse policía, como en la mayoría de países del mundo, como parte de una controvertida reforma de las fuerzas de seguridad aprobada por el Kremlin.


El proyecto, propuesto hace un año por el presidente ruso, Dmitri Medvédev, recibió el respaldo de 315 diputados del partido oficialista, Rusia Unida, mientras que 130 votaron en contra, según las agencias rusas.


La policía rusa comenzará a funcionar a partir del próximo 1 de marzo y su creación se enmarca en la ambiciosa reforma del Ministerio del Interior lanzada por el Kremlin para aumentar su eficacia y reducir la corrupción en sus filas.


La ley, que estipula un período transitorio hasta el 1 de enero de 2012, endurece los requisitos para entrar en sus estructuras, determina con mayor claridad sus derechos y obligaciones para evitar abusos, y reglamenta el uso de la fuerza física y las armas de fuego.


A partir de ahora, los policías rusos podrán utilizar porras contra los participantes en manifestaciones pacíficas, aunque cuenten con la autorización oficial.


Además, el policía podrá entrar en una vivienda particular sin contar con orden judicial si considera que la vida de un ciudadano corre peligro, prerrogativa que ha sido muy criticada por los activistas de los derechos humanos.


La ley también subraya que no podrá recurrir a las torturas, la violencia o métodos humillantes para impedir que una persona quebrante el orden público.


El partido oficialista de izquierdas Rusia Justa (RJ), que había apoyado el proyecto en primera lectura, lo rechazó finalmente al considerar que contiene cláusulas que allanan el camino para la violación de los derechos de los ciudadanos.


Mientras, los activistas de los derechos humanos consideran que, además de cambiar el nombre, el Kremlin debería centrar todos sus esfuerzos en la reforma profunda del Ministerio del Interior.


«Esto es una profanación. Ésta es una ley que no necesita nadie. La policía es una vertical (...) que está corrompida», apuntó el veterano activista Lev Ponomariov, citado por la agencia Interfax.


Al anunciar la reforma, Medvédev recordó que en Rusia los cuerpos policiales -llamados en tiempos zaristas gendarmería- recibieron el nombre de 'militsia', por similitud con milicia, tras las revoluciones burguesa de febrero y bolchevique de octubre de 1917.


Esto se hizo «para destacar su carácter popular, obrero y campesino» y evitar el término policía, considerado burgués y capitalista, indicó.


Según las encuestas, la gran mayoría de la población desconfía de las fuerzas del orden, cuyas estructuras son consideradas las más corruptas de la administración pública.