NOVENO DÍA DE HUELGA

Multitudinarias manifestaciones en Sudáfrica

La huelga nacional de funcionarios públicos, que está afectando seriamente a la enseñanza y sanidad, está promoviendo varias protestas.

Manifestación en Johannesburgo.
Multitudinarias manifestaciones en Sudáfrica
AFP PHOTO

Cientos de miles de personas se manifestaron en las calles de varias ciudades de Sudáfrica en la novena jornada de la huelga nacional de funcionarios públicos que afecta seriamente a los colegios y hospitales estatales.


En Ciudad del Cabo, al menos 10.000 huelguistas marcharon hacia el Parlamento para insistir en su petición de un aumento de sueldos del 8,6 por ciento y una ayuda para el pago de la vivienda de 1.000 rand mensuales (unos 100 euros), frente al 7 por ciento de incremento y a los 700 rand que ofrece el Gobierno.


En Johannesburgo, la primera ciudad de Sudáfrica, más de 17.000 manifestantes, según cifras de los sindicatos, danzaron y bailaron al ritmo de los cánticos de protesta frente a un fuerte contingente de la Policía, y portaban carteles en los que se podía leer "No a la explotación de las enfermeras" o "Defendiendo los derechos de los trabajadores".


"Queremos que el Gobierno sepa que sus funcionarios están muy enfadados", afirmó en el centro de Johannesburgo entre miles de manifestantes la directora provincial de la Asociación de Funcionarios Públicos en la ciudad, Monica Venter, según la agencia local SAPA.


Los departamentos de salud pública y educación están siendo los más afectados por la huelga nacional de funcionarios públicos, en las que más de 1,3 millones de trabajadores no acuden a sus puestos de trabajo desde el pasado día 18.


Numerosos colegios han tenido que cerrar sus puertas por la huelga, en la que participa la Unión Sudafricana Democrática de Profesores (SADTU), de 245.000 miembros, y varios departamentos provinciales de educación han tenido que posponer más de dos semanas importantes exámenes finales de la educación secundaria.


Expertos en educación afirman que esta huelga tendrá un "efecto devastador sobre los niños de Sudáfrica", puesto que sus cursos académicos ya se vieron reducidos considerablemente este año por la celebración del Mundial de Fútbol.


Además, el Gobierno se ha visto forzado a enviar a más de 2.800 soldados de la Fuerza de Defensa Nacional de Sudáfrica (SANDF) a 47 hospitales del país para que sus servicios básicos sigan funcionando, según informó el portavoz del ejército, Siphiwe Dlamini.


Sin embargo, la Unión de la Defensa Nacional de Sudáfrica (SANDU) dijo que "estaba pensando en solidarizarse con los huelguistas".


"El problema es que si (el Gobierno) no soluciona la situación, se nos va a empezar a ver como esquiroles, y no vamos a permitir que nuestros trabajadores sean vistos de esta forma", declaró ayer a la prensa el portavoz de SANDU, Jeff Dubazana.


Dubazana afirmó además que el Gobierno sufre de una "falta de liderazgo" y que "lo que solicitan los funcionarios públicos es muy razonable, puesto que deberían estar pidiendo un aumento del 16 por ciento en lugar del 8,6".


Asímismo, la Unión para los Derechos Civiles de la Policía y las Prisiones (POPCRU), formado por 145.000 policías, agentes de tráfico y carceleros afirmó también ayer que se unirían al paro a partir del próximo sábado.


Pero el Servicio Policial de Sudáfrica (SAPS) obtuvo hoy del Tribunal de Asuntos Laborales una orden judicial provisional que impide a los policías iniciar una huelga.


Por su parte, la Unión de Fuerzas de Seguridad de Sudáfrica (SASFU) también amenazó con hacer huelga puesto que "las condiciones socio económicas de los soldados son mucho peores que las de los profesores y enfermeras".


En un comunicado publicado por el Comité Ejecutivo Nacional de la SASFU, el sindicato anima a sus miembros a no actuar como esquiroles durante la huelga y afirma que sus miembros se reunirán el próximo domingo para debatir su participación en el paro.