PROTESTA EN BRUSELAS

Miles de belgas exigen un ejecutivo estable

La manifestación fue convocada por cinco estudiantes a través de la red social Facebook.

Miles de belgas, en la marcha de ayer bajo el lema 'Shame' (vergüenza en inglés).
Miles de belgas exigen un ejecutivo estable
OLIVIER HOSLET/EFE

Más de 30.000 personas tomaron ayer pacíficamente las calles de Bruselas para exigir la formación de un nuevo gobierno que ponga fin al estancamiento político en el que se encuentra sumido el país tras las elecciones parlamentarias del 13 de junio del año pasado. Si la dividida clase política belga no toma nota, el pequeño país del Benelux (Bélgica-Luxemburgo-Holanda) podría batir -el 17 de febrero- el récord mundial en la formación de un gobierno, actualmente ostentado por Iraq, con 289 días (en 2009). Por el momento, Bélgica tiene en su haber el dudoso honor de haber alcanzado -en enero- el récord europeo de ausencia de un gobierno estable (208 días), que tenía Holanda (1977).


Ayer, mientras tanto, la plataforma ciudadana de internet lerecorddumonde.be se encargaba de recordar que el país llevaba 224 días sin gobierno estable, con un gabinete en funciones, presidido por un primer ministro en funciones, el flamenco Yves Leterme, y que el calendario "sigue contando". Convocada a través de Facebook por cinco estudiantes de la Universidad Libre de Bruselas bajo el lema 'Shame' (en inglés, vergüenza), entre 30.000 y 35.000 personas, según fuentes policiales y de los organizadores, se manifestaron pacíficamente por las calles de Bruselas.


Los manifestantes exigieron un "diálogo abierto y franco entre los partidos neerlandófonos y francófonos". "¿Qué es lo que queremos? ¡Queremos un gobierno!", fue una de las consignas que se pudieron oír en la capital belga y comunitaria europea. "¡Un gobierno, ya, ahora, no podemos esperar más!", rezaba otra pancarta. "¡No en nuestro nombre, no dividiremos el país!", se aseguraba en otra.


Precisamente el lema 'No en nuestro nombre' fue la divisa bajo la cual numerosos artistas tanto de Flandes (comunidad del norte del país, de lengua neerlandesa) como de Valonia (sur, de lengua francesa) se dieron cita la noche del pasado viernes en un gran concierto en Bruselas para pedir "cordura y responsabilidad" a la clase política. También en ese megaconcierto-protesta se alertó de la -a juicio de los asistentes- "peligrosa deriva nacionalista" que ha adquirido la formación independentista flamenca Nueva Alianza Flamenca (NV-A) de Bart de Wever, vencedor de los comicios anticipados del 13 de junio pasado, y promotor de una separación gradual de Flandes del resto del país federal.


Precisamente las reclamaciones independentistas de los flamencos (casi el 60% de los once millones de belgas), a través de la NV-A, en pos de una mayor autonomía, es una de las principales piedras en el zapato que han frenado el acuerdo con el socialista Elio Di Rupo, ganador de los comicios de junio en Valonia y valedor de la unidad.