INTERVENCIÓN EN EL CONGRESO DE EE. UU.

Merkel: "Es inaceptable que Irán tenga bombas nucleares"

La canciller alemana se entrevista en la Casa Blanca con Obama e interviene en el Congreso de EE. UU.

Angela Merkel y Barack Obama conversan en el Despacho Oval de la Casa Blanca, ayer.
Merkel: "Es inaceptable que Irán tenga bombas nucleares"
OLIVIER DOULOERY/EFE

Una bomba nuclear en manos iraníes es "algo inaceptable", afirmó ayer la canciller alemana, Angela Merkel, en un discurso ante el Congreso de EE. UU. en el que analizó los lazos bilaterales y pidió colaboración sobre el cambio climático.

 

Merkel intervino por espacio de media hora ante ambas Cámaras del Congreso estadounidense, un honor que se concede a pocos líderes extranjeros y que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ofreció a la canciller al cumplirse la próxima semana el 20 aniversario de la caída del Muro de Berlín.

 

En su intervención, en tono apasionado en ocasiones y acogido con calidez entre los legisladores, Merkel aseguró que "una bomba nuclear en manos de un presidente iraní que niega la existencia del Holocausto, que amenaza a Israel y niega el derecho a existir de ese país es algo inaceptable". Las declaraciones de Merkel se producen cuando las potencias internacionales tratan de llegar a un acuerdo con Irán por el que Teherán entregaría a Rusia el uranio poco enriquecido de su central de Natanz para que ese país lo refinara más hasta llegar a un grado suficiente para fines médicos.

 

Después de que las autoridades iraníes señalaran la semana pasada su disposición a aceptar el acuerdo, ayer el líder espiritual de la República Islámica, Alí Jameneí, dijo que Irán "no quiere negociación alguna en la que el resultado sea dictado con antelación por Estados Unidos".

 

En su discurso de ayer, el primero de un líder alemán en 52 años, la canciller alemana también lanzó un llamamiento al Congreso estadounidense para que coopere en la lucha contra el cambio climático. "No tenemos tiempo que perder... necesitamos un acuerdo en Copenhague" el mes próximo durante la reunión de la ONU, insistió Merkel.

 

Aunque el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, es un firme defensor de la lucha contra el calentamiento global, el Congreso se ha mostrado más renuente y es improbable que aborde antes del año próximo la legislación que permita combatir el cambio climático, demasiado tarde para la reunión de Copenhague.

 

Merkel expresó también el apoyo de su país a una estrategia en Afganistán que se centre en la capacitación de ese pueblo para hacerse cargo de su propia seguridad.

Apoyo a la reunificación

La parte más emotiva de la intervención de Merkel, originaria de la antigua Alemania del Este, se produjo al expresar su agradecimiento por el apoyo estadounidense a la reunificación de su país. Describió su vida como una niña criada en la Alemania del Este, hija de un pastor protestante y de una maestra, y cómo "nunca", en sus mejores sueños, hubiera pensado "que este día iba a llegar".

 

"No me cabía en la cabeza pensar en viajar a Estados Unidos, mucho menos comparecer ante ustedes algún día", declaró.

 

Antes de su discurso en el Congreso, Merkel se había reunido en la Casa Blanca por espacio de media hora con Obama, quien resaltó el "liderazgo extraordinario" de la canciller. Ambos abordaron asuntos como Irán o Afganistán, en momentos en los que Obama trata de decidir una nueva estrategia para la guerra en el país centroasiático y si envía más refuerzos.