MÉXICO

Los pilotos del avión en el que murió el ministro de Interior mexicano carecían de la preparación necesaria

El Gobierno de México reveló que los pilotos del avión en el que murió la semana pasada el ministro del Interior, Juan Camilo Mouriño, cometieron errores que al parecer provocaron el accidente, al acercarse en exceso a otro aparato, y que carecían de formación suficiente para manejar la aeronave.


La información fue proporcionada en una rueda de prensa por el ministro de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez, que presentó un informe preliminar de las investigaciones elaborado a partir del contenido de las cajas negras del avión, analizadas esta semana en Washington.

 

Los últimos 17 segundos

Los últimos 17 segundos de diálogo en la cabina del avión que cayó el 4 de noviembre en Ciudad de México, con seis funcionarios a bordo, muestran que el piloto perdió el control al parecer por turbulencias causadas por la estela de un avión mayor.


Según la transcripción difundida por las autoridades mexicanas, el copiloto Álvaro Sánchez, que era más experimentado que el piloto Martín de Jesús Oliva, asume de emergencia el mando para evitar el accidente, pero ya no puede hacer nada.


Las autoridades mexicanas sólo difundieron el texto, al señalar que las prácticas internacionales no permiten entregar las grabaciones por respeto a la privacidad de la tripulación en un momento de gran dramatismo.


Los resultados preliminares indican que el piloto del Learjet 45 no redujo la velocidad a tiempo y con ello no pudo guardar la distancia debida de un Boeing 767 que iba delante, lo que le ocasionó turbulencia.


Estos son algunos de los fragmentos principales de la conversación que precedió la caída, ocurrida a las 18 horas 46 minutos y 30 segundos de Ciudad de México (00:46:30 GMT) en un área de oficinas:


00:46.13 GMT


Piloto: Órale, la turbulencia de este Copiloto: Ay, buey Piloto: Ay, cabrón


00:46.18 GMT:


Copiloto: Ay, cabrón Piloto: Ay, ay ... Álvaro, ¿qué hacemos, Álvaro? Copiloto: (incomprensible) Copiloto: Déjamelo, déjamelo, déjamelo, déjamelo. Piloto: Tuyo, Álvaro Piloto (aparentemete): Hijos de tu puta madre Piloto (aparentemente): No, Álvaro


Según la transcripción, en el ambiente se escucha un sonido similar a la alarma del alertador de pérdida de altura. Al mismo tiempo, suena la alarma del sistema alertador de proximidad contra el terreno


00:46.30 GMT:


Copiloto (aparentemente): ¡Diosito!


En ese momento se terminan la grabación.