CUMBRE EN LISBOA

Los países lusófonos promoverán la internacionalización del portugués

Los ocho países de la comunidad lusófona, en la que viven 240 millones de personas, acordaron en una cumbre de presidentes promover la lengua portuguesa a nivel internacional y aumentar su presencia en Internet.


En la VII Cumbre de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP), participaron Portugal, Brasil y otras seis ex colonias lusas que decidieron también aumentar la cooperación, las relaciones políticas y culturales y las acciones concertadas ante el resto del mundo y ante los organismos multilaterales.


El presidente portugués, el conservador Anibal Cavaco Silva, se declaró muy satisfecho por los resultados de la reunión y destacó que la lengua lusa será un idioma "más internacional". El primer ministro de Portugal, el socialista José Sócrates, cuyo país asumió la presidencia rotatoria de la CPLP en sustitución de Guinea Bissau, declaró que las prioridades de su gestión serán, además de la lengua, la educación, cultura, energía y seguridad alimentaria.


El presidente brasileño, Luis Inacio Lula da Silva, pidió en ese sentido, en un debate de la conferencia, medidas contra la crisis mundial de alimentos, de la que responsabilizó al proteccionismo, el precio del petróleo y el abandono de la agricultura, entre otros factores, pero no a los biocombustibles.


Lula defendió la fabricación de carburantes a partir de la agricultura, puso como ejemplo a su país y abogó por reducir la dependencia de alimentos importados a precios artificialmente bajos con mayores recursos agrícolas y eliminación de prácticas desleales y subsidios en el comercio mundial.


Sócrates anunció que promoverá una reunión de ministros de energía, animó a invertir recursos en la lengua porque es "donde se juega el futuro de la afirmación de la CPLP" y destacó el aumento de influencia de esta organización y el peso que ha ganado Brasil en el mundo o Angola en África.


Esta ex colonia lusa ejercerá la próxima presidencia de la CPLP, desde 2010, y albergará ese año la VIII cumbre del organismo, creado en 1996 en otra conferencia celebrada en Lisboa y cuyo nuevo secretario ejecutivo es ahora Domingo Simoes, de Guinea Bissau.


El jefe de Estado de esa nación, João Bernardo "Nino" Vieira, reconoció las dificultades que supone para la comunidad lusófona la "discontinuidad geográfica" entre sus miembros y la "falta de recursos".


Pero Sócrates destacó que en las diferencias entre los miembros hay también una gran riqueza y posibilidades de cooperación.


El gobernante luso abogó por fijar fechas en la adopción del Acuerdo Ortográfico de la Lengua lusa a nivel internacional, que su país promulgó la semana pasada pese a las críticas de intelectuales y académicos molestos por supuestas imposiciones de Brasil para unificar las variantes europea y americana del idioma.


En la reunión se aprobó la incorporación como observador de Senegal, país del África francófona que comparte ese estatuto con Islas Mauricio y Guinea Ecuatorial.


El presidente ecuatoguineano, Teodoro Obiang, participó en la cumbre, pero no se cumplieron sus deseos de ser miembro de pleno derecho de la CPLP, la cual acordó dejar en estudio esa vinculación con vistas a la cumbre de 2010, en la que podría examinarse también aceptar como observador a Marruecos.


La declaración final de la cumbre defendió los valores de la democracia, los derechos humanos y la justicia social, pidió la "revitalización" de la ONU, y alentó la consolidación de la estabilidad en Guinea Bissau y Timor Este.


Los documentos de la cumbre, que incluyeron un acuerdo de protección consular entre los miembros, respaldaron la lucha contra el Sida, la participación de la sociedad civil en la comunidad y la circulación de bienes culturales.


Además de Cavaco, Lula y Vieira, en la cumbre participaron los jefes de Estado de Cabo Verde, Pedro Pires; San Tomé y Príncipe, Fradique de Menezes; y Timor Este, José Ramos-Horta.


Angola estuvo representada por el primer ministro, Fernando Dias dos Santos, y Mozambique por el ministro de Exteriores, Oldemiro Balói.