DESAPARECIDA EN 2007

La Policía portuguesa descartó pistas sobre el posible paradero de Madeleine

La familia de la niña británica saca estas conclusiones del dosier del caso, cerrado en 2008.

La Policía portuguesa descartó numerosas pistas de todas partes del mundo sobre el posible paradero de la niña Madeleine McCann, desaparecida en Portugal en 2007, según la familia de la pequeña, que ha conseguido una copia de este dosier.

 

El documento, archivado por la Policía portuguesa cuando cerró el caso en julio de 2008, pudo llegar el martes a manos de la familia por orden de un tribunal portugués, informó ayer el diario británico 'Daily Mail'.

 

El dosier, formado por 2.000 folios, nunca fue entregado a los investigadores privados contratados por Gerry y Kate McCann, los padres de la pequeña desaparecida en mayo de 2007 de la habitación en la que dormía en un centro turístico del Algarve (sur portugués).

 

Entre las pistas que contiene figuran imágenes tomadas de cámaras de circuito cerrado de seguridad en Nueva Zelanda, mientras que hay información de las Fuerzas del Orden de Estados Unidos, países europeos y África del Norte considerada importante, agregó el rotativo.

Actitud sospechosa

En el caso de las imágenes tomadas en Nueva Zelanda siete meses después de la desaparición de la pequeña Madeleine, se puede ver a una niña muy similar a ella que entra con un hombre a un supermercado.

La actitud sospechosa de este hombre llamó la atención de la encargada de seguridad del supermercado, que pensó que podía tratarse de Madeleine y denunció el caso a la Policía, que a su vez decidió enviar las imágenes a Portugal.

 

Kate McCann, de 41 años, dijo a los medios británicos que el contenido de este archivo es desgarrador e impactante.

 

La existencia de este dosier se conoció a raíz de las medidas legales tomadas por los padres de Madeleine contra Gonçalo Amaral, el detective que estuvo a cargo del caso de la niña y que no pudo publicar un libro en el que relacionaba a los padres con una supuesta muerte de la menor.

 

El mes pasado la juez del Tribunal Civil de Lisboa, Gabriela Cunha Rodrigues, hizo definitiva la prohibición de venta del libro, 'Maddie, la verdad de la mentira', de Amaral.

 

Tras conocer el fallo judicial, Amaral anunció que recurrirá la sentencia y añadió que se siente "censurado". Por su parte, los representantes de los padres de la niña, Kate y Jerry McCann, anunciaron que seguirán adelante con otras demandas interpuestas contra él y que estudian pedir la reapertura del caso Madeleine, cerrado en 2008.

 

El matrimonio McCann, que no acudió al tribunal, negó siempre las insinuaciones del libro de Gonçalo Amaral sobre su presunta relación con la desaparición de la pequeña y además le responsabilizan de haber perjudicado la búsqueda de la menor, a la que creen viva.