La OTAN investigará los bombardeos a civiles

La OTAN ha prometido este jueves, tras asumir el mando de todas las operaciones militares en Libia autorizadas por la ONU para proteger a la población civil de los ataques del régimen de Muamar Gadafi, que aplicará de forma «estricta» la resolución y aplicará normas de enfrentamientos «muy estrictas» pactadas por los Veintiocho aliados para limitar daños potenciales a civiles.

»Todas las operaciones están siendo dirigidas ya desde Nápoles por el general Bouchard», ha confirmado en rueda de prensa el presidente del Comité Militar de la OTAN, almirante Giampaolo Di Paola. «La OTAN está operando estrictamente de acuerdo con las resoluciones 1970 y 1973» del Consejo de Seguridad de la ONU, ha asegurado.

La OTAN dirige desde primera hora de la mañana de este jueves todas las operaciones para aplicar la zona de exclusión aérea, el embargo de armas y «las acciones para proteger a los civiles y las zonas pobladas», que dan cobertura a los ataques selectivos contra objetivos militares en tierra que ha venido realizando la coalición internacional al frente de la operación 'Odisea en el Amanecer' bajo mando de Estados Unidos.

Más de 90 patrullas

El comandante al frente de todas las operaciones de la OTAN en Libia, el teniente general canadiense Charles Bouchard, ha confirmado en rueda de prensa que ha asumido el «mando internacional único» de todas las misiones desde las 6.00 horas de este jueves (8.00 hora peninsular española) y ha dejado claro que la OTAN será «cuidadosa» y aplicará reglas de enfrentamiento «muy estrictas» para limitar daños potenciales a civiles.

La transición de mando se ha producido «sin ningún fallo» y ha confirmado que «la OTAN ya ha comenzado misiones de vigilancia y reconocimiento en la zona de exclusión aérea», que cubre todo el territorio libio, concretamente «más de 90 misiones».

Bouchard ha confirmado que la operación cuenta con «más de 100 aviones y medios de apoyo», así como con «una docena de barcos», mientras que Di Paola ha precisado que hay 20 países de la OTAN que contribuyen con medios y «varios» países de la región, incluidos Qatar y Emiratos rabes, aunque hay «otros que han expresado su interés» en participar también, lo que confirma que el proceso de generación de fuerzas todavía está en marcha.

España ha puesto bajo mando de la OTAN los cuatro aviones de combate F-18 y un avión cisterna para aplicar la zona de exclusión aérea y una fragata F-100, un submarino y un avión de vigilancia marítima para contribuir a aplicar el embargo, según han confirmado fuentes diplomáticas.

La operación podría prolongarse «hasta 90 días». No obstante, la OTAN espera que dure «mucho menos», si bien admite que dependerá del cumplimiento por parte del régimen de «las tres condiciones» que le impuso la resolución: cese inmediato de la violencia, dejar de atacar a civiles y que facilite el acceso humanitario sin obstáculos, ha explicado el almirante Di Paola.

Ambos han insistido en que el objetivo de la misión de la OTAN es «proteger los civiles y las zonas pobladas de ataques o amenazas de ataque». Di Paola ha reconocido que la situación sobre el terreno «es muy completa y fluida», aunque ha prometido que la Alianza aplicará de forma «estricta» la resolución.

El general canadiense ha dejado claro que no se permitirá ningún avión sobrevolando Libia salvo para operaciones de «ayuda y humanitarias» y ha dejado claro que ya tienen «equipos armados a bordo» de la docena de buques en el Mediterráneo «listos para actuar si lo necesitan» para aplicar el embargo de armas. «La OTAN puede actuar contra todos los vuelos que violen la zona de exclusión aérea», ha recalcado.Excluye la posibilida de armar a los rebeldes

Los aliados no ha discutido «para nada» en el seno de la OTAN la opción de armar a los rebeldes del Consejo Nacional Libio y ha dejado claro que protegerá a «todos» los civiles, con independencia del bando, según Di Paola. «Haremos lo mismo para todos los civiles. No miramos la identidad de los civiles. Pero es un hecho consumado que la amenaza de ataques procede de un lado», ha explicado el almirante italiano.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha dejado claro desde Estocolmo que la OTAN está «para proteger a civiles, no para armar a los rebeldes», aunque el almirante Di Paola ha reconocido que hay «interpretaciones diferentes» sobre si armar a los sublevados constituye «una violación o no» de la resolución de la ONU 1973, que da cobertura a la intervención militar de los países aliados.

»Aplicaremos ciertamente el embargo de armas. Respetaremos estrictamente el cumplimiento de la resolución», ha asegurado. «Si hoy hay un barco que transporta armas o mercenarios se le parará», ha explicado, al tiempo que ha dicho que «confían» en que «nadie en la Alianza» decidirá armar a los rebeldes. «Estamos unidos en nuestra interpretación», ha recalcado.

En cualquier caso, Di Paola ha asegurado que no han constatado «ninguna prueba de ningún barco que haya intentado violar el embargo de armas o que lo haya intentado». «Esperamos y confiamos en que los (países) vecinos también apliquen el embargo de armas», ha explicado la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, preguntada por qué la OTAN no aplica el embargo en tierra. «Esperamos que otros apliquen su parte», ha zanjado.

Se investigará el bombardeo de Trípoli

La OTAN dijo que investigará un bombardeo sobre Trípoli que habría causado ayer al menos cuarenta muertos y fue denunciado por el vicario apostólico de la capital libia, el obispo Giovanni Innocenzo Martinelli.«Conocemos esa información. La investigación verá si fuerzas de la OTAN estuvieron o no implicadas en ese incidente», señaló el responsable de la operación «Protector Unificado» de la organización, el general Charles Bouchard, en una vídeo conferencia desde el cuartel aliado de Nápoles (sur de Italia).

Bouchard añadió que se informará «cuando la investigación esté completada».

Aun así, el general canadiense recordó que el supuesto bombardeo habría tenido lugar antes de que la Alianza Atlántica asumiera completamente el mando de las operaciones internacionales sobre Libia, lo que tuvo lugar a las 06.00 de .

El prelado Martinelli, en declaraciones a la agencia vaticana Fides difundidas hoy en Roma, indicó que ayer fueron alcanzados por los bombardeos varios hospitales de Trípoli, uno de ellos en el barrio de Misda, en el sur de la capital.