CONGO

La ONU acusa a los rebeldes tutsis de violar el alto el fuego

Los rebeldes tutsis consideran, por su parte, que con el refuerzo de las tropas gubernamentales en la ciudad de Goma, "se están dando las condiciones para la guerra"

Naciones Unidas acusó a los rebeldes tutsis del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP) de violar el alto el fuego en el este de la República Democrática del Congo (RDC), al ocupar dos pueblos que fueron posteriormente recuperados por topas gubernamentales.


El portavoz militar de las Naciones Unidas para el Congo(MONUC), teniente coronel Jean Paul Dietrich, dijo por teléfono en Goma, la capital de la provincia oriental congoleña de Kivu Norte, que guerrilleros tutsis del CNDP ocuparon durante poblaciones de Nyanzale y Kikuku.


Las dos localidades, situadas unos 80 kilómetros al noreste de Goma, fueron posteriormente recuperadas en una contraofensiva por las Fuerzas Armadas de la RDC, según Dietrich, quien calificó los hechos de "incidente" provocados por el CNDP, que lidera Laurent Nkunda.


La situación en Kivu Norte es cada día más tensa, tras los enfrentamientos registrados después de la declaración del alto el fuego por los rebeldes de Nkunda el pasado 27 de octubre, cuando llegaron a las puertas de Goma.


Los rebeldes tutsis consideran, por su parte, que con el refuerzo de las tropas gubernamentales en la ciudad de Goma, "se están dando las condiciones para la guerra", según dijo su portavoz, Bertrand Bisimwa.


Bisimba recalcó que el CNDP "mantiene el alto el fuego y las mismas fuerzas que tenía en los alrededores de Goma, donde no ha enviado refuerzos, pero está listo para hacerlo" si el Gobierno de Kinshasa, que preside Joseph Kabila, sigue mandando tropas.


"Nosotros habíamos pedido a la MONUC (Misión de la ONU para el Congo) que no dejara entrar a los militares (de las Fuerzas Armadsas de la RDC) en Goma, pero lo ha hecho y han llegado más", recalcó Bisimwa.


Por este motivo, reiteró, "se están dando las condiciones para la guerra", que Nkunda ha afirmado que llevará hasta Kinshasa para derrocar al régimen del presidente Joseph Kabila, si este no accede a establecer las negociaciones directas que él ha solicitado.


Nkunda acusa a Kabila, entre otras cosas, de no proteger a la minoría tutsi de la RDC y permitir la presencia en territorio del país de guerrilleros hutus ruandeses, a los que se relaciona con el genocidio de Ruanda de 1994, en el que en cien días se calcula que fueron asesinados 800.000 tutsis y hutus moderados.


Por su parte, los "cascos azules" de la MONUC han recibido en Goma la orden de abrir fuego contra los rebeldes si éstos intentan ocupar la ciudad, según el subsecretario general de la Naciones Unidas para Operaciones de Paz, Alain Le Roy.


Desde que se reanudaron las hostilidades en el este de la RDC en agosto pasado, unas 250.000 personas se han visto desplazadas de sus casas en la zona, 100.000 de ellas durante la ofensiva del CNDP de las dos últimas semanas.


De los alrededor de seis millones de habitantes que hay en la provincia congoleña de Kivu Norte, se calcula que una quinta parte, 1.200.000, viven desplazados y en una situación desesperada, que se ha agravado en estas últimas semanas.