EX PRESIDENTE DEL FMI

La Fiscalía no puede probar que el encuentro sexual de Strauss-Kahn fue forzado

La Fiscalía de Manhattan insta al juez a retirar los cargos que pesan sobre Strauss-Kahn porque tiene dudas sobre la credibilidad de la camarera que lo acusa de agresión sexual.

Strauss-Kahn en una llegada con su mujer al tribunal de Nueva York.
Strauss-Kahn se declara no culpable de los delitos sexuales que se le imputan
AFP PHOTO

La Fiscalía de Manhattan recomendó este lunes al juez retirar los cargos contra Dominique Strauss-Kahn porque tiene dudas sobre la credibilidad de la demandante y no puede probar "más allá de toda duda razonable" que el encuentro sexual fuera "forzado y sin consentimiento".


Así consta en la moción presentada esta tarde por la oficina del fiscal, Cyrus Vance, ante el juzgado de Michael Obus, quien se espera que mañana tome una decisión sobre si acepta la recomendación y retira los siete cargos por agresión sexual e intento de violación contra el político y economista francés.


Después de una extensa investigación, la Fiscalía asegura en el escrito tener claro que probar dos de los elementos clave de la demanda, los que se refieren "al uso de la fuerza y a la falta de consentimiento" en el incidente del pasado 14 de mayo en el hotel Sofitel, dependerán exclusivamente del testimonio de la demandante.


Según la oficina del fiscal Vance, las pruebas "físicas y científicas" obtenidas durante la investigación establecen que el acusado mantuvo una "relación sexual apresurada" con la demandante, pero por primera vez dice que no se puede probar "de forma independiente" si fue un encuentro "forzado y sin consentimiento".


La Fiscalía dice que en el curso de la investigación se recogieron muestras de semen que resultaron ser del político francés tanto en la alfombra de la habitación donde ocurrieron los hechos como en el uniforme de la demandante, pero no permitieron corroborar que fue por la fuerza.


Aunque recuerda que haber mentido o cometido algún delito en el pasado no es motivo para descartar una denuncia, la Fiscalía añade en el escrito que las "falsedades" en las que ha caído desde que comenzó el caso Nafissatou Diallo, la inmigrante guineana que acusa a DSK, les impiden dar crédito a su versión de los hechos.

La credibilidad en duda

"Si no le creemos a ella más allá de toda duda razonable, tampoco podemos pedirle al juez que le crea", añade en la moción, firmada por los asistentes del fiscal John McConnell y Joan Illuzi Orbon, en la que aseguran que mintió a la Fiscalía y el gran jurado sobre su pasado y su actuación tras el incidente del pasado 14 de mayo.


La Fiscalía, que asegura no haber tomado la decisión "a la ligera", insiste varias veces en que la credibilidad de Diallo ha quedado en entredicho, lo cual hace imposible que resolver la cuestión sobre qué ocurrió exactamente aquel día en la suite del hotel neoyorquino.


La oficina de Vance incluye en la moción, de 25 páginas, una lista de las inconsistencias en las que cayó la demandante desde que denunció el caso, desde diferentes versiones sobre lo ocurrido inmediatamente después del incidente, hasta sus mentiras "bajo juramento" sobre su pasado y las llamadas que hizo tras la denuncia.


En suma, añade la Fiscalía, la empleada del hotel Sofitel ha mentido de forma "persistente" y a veces "inexplicable" a la hora de describir hechos de gran significado y detalles menores, por lo que considera que la "verdad" sobre lo que pasó ese día y el pasado de Diallo sigue siendo "escurridiza".