Estados Unidos

Irene llega a Nueva York tras dejar nueve muertos en la costa este

El alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg indicó que ya es demasiado tarde para evacuar y pide a los ciudadanos que "no salgan a la calle".

Times Square se queda vacía por la alerta.
Times Square se queda vacía por la alerta.
AFP

Al menos nueve muertos, más de un millón personas sin electricidad y numerosos daños materiales es el balance hasta el momento del paso del huracán Irene, que ya ha llegado a Nueva York, por la costa Este de EEUU.


En una rueda de prensa para anunciar la llegada del huracán, el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, que había ordenado la evacuación obligatoria de las zonas por debajo del nivel del agua -que afecta a 370.000 personas-, indicó que ya es demasiado tarde para obedecer esa orden.


"Se acabó el tiempo", indicó Bloomberg, quien instó en inglés y en español a quienes permanezcan en las zonas de peligro a quedarse en el interior de sus viviendas.


Con vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros, Irene, un huracán de categoría 1 en la escala de Saffir Simpson, de un máximo de cinco, se desplaza por la costa atlántica y se espera que llegue a Nueva York el domingo, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EE.UU., en su boletín de las 01.00 GMT de hoy.


"Se pronostica que permanecerá como huracán al desplazarse cerca o sobre el centro de la costa atlántica y se aproxime a Nueva Inglaterra. Cuando toque tierra de nuevo se debilitará hasta convertirse en un ciclón post-tropical el domingo en la noche o el lunes", vaticinó el CNH.


Al menos nueve personas -cinco en Carolina del Norte, tres en Virginia y uno en Florida- han perdido la vida a causa del huracán, la gran mayoría al caerles árboles o ramas de gran tamaño, según las autoridades. Entre ellos figuran dos menores.


A causa del temporal se formaron tornados en los estados de Delaware y Maryland.


El presidente Barack Obama, que había adelantado su regreso de vacaciones a causa del huracán, se desplazó hoy al centro de operaciones de la Agencia Federal de Gestión de Desastres (FEMA) en Washington para recibir actualizaciones acerca del curso del ciclón y las medidas de prevención tomadas.


Obama, que mantuvo también dos conferencias telefónicas con los responsables de la respuesta al ciclón, indicó que "las próximas 72 horas van a ser muy largas" y señaló que las principales preocupaciones de las autoridades son "las inundaciones y los cortes de suministro eléctrico".


El transporte en la región noreste de EE.UU. está totalmente paralizado, y tanto los aeropuertos como el servicio ferroviario ha sido suspendido durante el fin de semana, lo que ha ocasionado la suspensión de más de 10.000 vuelos internacionales y nacionales.

Tanto Washington D.C. como Nueva York han declarado el estado de emergencia.


Las autoridades de Nueva York han suspendido el servicio de transporte público en la ciudad, que incluye el metro, los autobuses y el servicio de ferrys que conectan la isla de Manhattan con los demás distritos y, además, han advertido que los puentes podrían cerrarse dependiendo de los vientos en lo que resta de día.


El huracán emergió sobre las aguas del Atlántico después de azotar a Carolina del Norte con lluvias intensas, inundaciones y marejadas ciclónicas.


Su ojo tocó tierra hoy cerca de cabo Lookout, en Carolina del Norte, según el CNH, con sede en Miami.


Se traslada hacia el norte-noreste a 26 kilómetros por hora y acelerará su marcha para cruzar el noreste de Carolina del Norte para luego avanzar hacia el centro de la costa atlántica hoy en la noche y arribar al sur de Nueva Inglaterra el domingo.


Irene estaba localizado a las 01.00 GMT de hoy a 160 kilómetros al sur-suroeste de Ocean City, en Maryland, y 460 kilómetros al sur-suroeste de la ciudad de Nueva York.


Está vigente un aviso de huracán (paso del sistema en 36 horas) desde Carolina del Norte hasta Massachusetts, incluyendo a la ciudad de Nueva York y Long Island.


Se mantiene un aviso de tormenta tropical desde Maryland hasta la frontera entre Estados y Canadá.


Irene arrojará entre 15 y 30 centímetros de lluvia desde el este de Carolina del Norte hasta Nueva York y Nueva Inglaterra, según el CNH.


Este es el primer ciclón que impacta territorio estadounidense desde 2008 cuando "Ike" tocó tierra en Galveston, Texas.