TERREMOTO EN EL CARIBE

España realizará 6.000 pruebas de ADN en Haití para luchar contra el tráfico de menores

Las muestras se incluirán en bases de datos de la Universidad de Granada, que ha ideado este programa.

Una mujer sostiene en brazos a un niño en un refugio, ayer en Puerto Príncipe
España realizará 6.000 pruebas de ADN en Haití para luchar contra el tráfico de menores
EFE

El Gobierno español pondrá en marcha en breve en Haití un programa de identificación genética para luchar contra el tráfico ilegal de menores. El programa, denominado DNA-Prokids, estará operativo en menos de diez días y en una primera fase permitirá hacer entre 5.000 y 6.000 pruebas de ADN, según anunció ayer la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez. Para llevar a cabo este proyecto pionero en el país caribeño, el programa, ideado por la Universidad de Granada, consistirá en tomar muestras biológicas de saliva de los menores de 18 años que carezcan de familia reconocida a causa del terremoto que asoló Haití y de los padres y madres que denuncien la desaparición de sus hijos.

 

Las muestras recogidas se incluirán en dos bases de datos de la Universidad de Granada, que se pondrá a disposición de las autoridades de Haití. Este programa, con la cooperación de la Universidad del Norte de Texas, ya ha funcionado eficazmente en 12 países y ha contribuido a identificar a más de 230 menores víctimas del tráfico ilegal de personas. El programa que se aplicará en Haití trata de identificar, a través de pruebas de ADN, a niños desamparados que no saben si sus padres han fallecido a causa del seísmo o están sin localizar.

 

La secretaria de Estado de Cooperación Internacional subrayó que la "rapidez" en la puesta en marcha de este programa es un "elemento fundamental" debido a la "situación de confusión" que vive el país. Se trata, dijo, de "actuar rápidamente y anunciar esta medida para mandar un mensaje claro a quienes trafican con niños al encontrarse en una situación de vulnerabilidad", enfatizó.

El programa de identificación genética comenzará a aplicarse a los menores que están en orfanatos, hospitales y otros lugares improvisados para refugiar a los niños desamparados. Una vez recogidas las muestras, se enviarán inmediatamente a España, donde se custodiarán, junto a la de los padres que hayan denunciado la desaparición de sus hijos, en sendas bases de datos creadas al efecto por la Universidad de Granada, donde se cruzará la información.

 

La prueba genética es sencilla y consiste en introducir en la boca una tira con la que se recoge una muestra de saliva (en puridad, de las células epiteliales). A la muestra se le adjudican la filiación de los datos del niño. Se actúa igual con los adultos, para que en las bases de datos pueda verificarse si un niño ha quedado huérfano o si sus padres viven. Los datos de identificación de las personas se quedan en Haití y las pruebas de ADN, con un código determinado, permanecen en los bancos de datos de la Universidad de Granada.

 

José Antonio Lorente, director del laboratorio de identificación genética de la Universidad de Granada, aseguró que tienen capacidad para realizar entre 800 y mil análisis de ADN al día, aunque la Universidad de Texas puede alcanzar los 4.000 diarios.

 

La información pasa a las bases de datos y el programa informático busca la comparación genética entre los menores y los posibles padres. El proceso de análisis tarda entre 24 y 48 horas. El coste de los kits de ADN corre a cargo de la Universidad de Granada, que a su vez es financiada por otras entidades privadas y gubernamentales. Cada prueba tiene un coste de 250 euros, si bien todo el programa en su conjunto se realizará de forma gratuita para Haití.

Alerta de Unicef

A la vez que se presentaba este programa, Unicef destacó ayer que hay muchos padres buscando a sus hijos en Haití por lo que estima que lo prioritario es trabajar por la reagrupación familiar de los menores, que son el 40% de la población que está recibiendo ayuda, además de luchar contra el tráfico de niños. "Antes del terremoto, más de mil niños al año eran víctimas de las mafias, que les sacaban del país a través de la frontera", explicó la asesora de protección infantil de Unicef, Nadine Perrault, de visita en España procedente de Haití, quien denunció que "la situación ahora es muy preocupante porque las instituciones que estaban trabajando en la persecución de estas redes están débiles".

 

Perrault relató que muchos policías murieron y los edificios de estas instituciones están destruidos, circunstancia que "algunas personas están aprovechando". Por ello, las oenegés trabajan con las Fuerzas de Seguridad en el control de aeropuertos y fronteras, aunque destacó la dificultad "porque las fronteras son muy largas".

 

"La respuesta de las familias que quieren adoptar es impresionante, pero la prioridad son los niños y nuestra experiencia dice que hay que atenderles en su país, intentar darles todas las comodidades posibles y buscar allí a sus familiares, porque muchos sí que tienen", explicó por su parte Marta Arias, directora de Sensibilización de Unicef.

 

En otras catástrofes, como el tsunami de Indonesia, se ha constatado que no es conveniente tener prisa para poner en marcha adopciones internacionales. "Hace falta un tiempo largo, de meses, para poder ofrecer todas las garantías en esos procesos y que se tenga toda la documentación necesaria", dijo Arias, quien añadió que solo espera que Haití no desaparezca en 24 horas de la conciencia de la gente ni de los informativos.