VUELVEN LAS PROTESTAS

El paro vuelve al campo argentino que no exportará cereales

Tras un mes de negociaciones sin resultados, los campesinos vuelven a protestar en las carreteras.

Tras poco más de un mes de negociaciones estériles con el gobierno, los productores rurales de Argentina volvieron a la protesta en carreteras del interior del país. Esta vez no impiden el tránsito general de camiones con alimentos sino sólo el de aquellos que transporten granos para exportación. De esa manera buscan afectar la recaudación impositiva que esperaba recoger el Estado en plena cosecha.


La medida de fuerza fue resuelta por las cuatro entidades que agrupan a chacareros grandes, pequeños y medianos luego de 35 días de un diálogo tenso, que muchas veces amenazó con fracasar, y que costó la renuncia del ministro de Economía Martín Lousteau, primera y única baja hasta ahora en el gabinete de Cristina Fernández.


Los productores habían lanzado la primera protesta el 12 de marzo en respuesta a la decisión oficial de aumentar de 35 a 44 por ciento el impuesto a las exportaciones de soja y de 32 a 39 la alícuota del girasol. La idea había sido diseñada por el ahora ex ministro de Economía, pero el gobierno la mantiene.


Enojados, los productores llegaron hasta los caminos y cortaron el paso de camiones en 14 provincias. Fueron más de 400 piquetes que se sostuvieron día y noche durante 21 días y provocaron desabastecimiento en las ciudades además de un fuerte desgaste a la gestión de la presidenta que había asumido hacía cuatro meses.


El 2 de abril los dirigentes declararon una tregua de un mes para negociar, pero sumaron al reclamo por el aumento de impuestos una agenda más amplia vinculada a la producción de alimentos en un contexto de creciente demanda internacional. Pero las gestiones no rindieron los frutos esperados y el diálogo fracasó.

Medidas de fuerza


Los productores iniciaron este jueves una nueva medida de fuerza, esta vez por ocho días y sin cortes totales de rutas. Se apostaron a la vera de los caminos e impiden el paso de granos para exportar, de modo de impedir que los impuestos por esas ventas abulten las arcas fiscales. La medida causó impacto en el mercado financiero que teme por el desgaste al que está sometida la presidenta y su gestión económica.


El ministro del Interior, Florencio Randazzo, señaló que este regreso al paro "es irresponsable". Diversos funcionarios explicaron que intentaron dialogar, pero los productores no aceptan ninguna medida que no sea las que ellos piden.