RUSIA

El Kremlin acorrala al último opositor liberal

El ex primer ministro Mijaíl Kasiánov está acusado de falsificar miles de firmas electorales.

La Fiscalía General de Rusia anunció la incoación de un proceso penal por la falsificación de firmas presentadas a la autoridades electorales en respaldo de la candidatura presidencial del ex primer ministro Mijaíl Kasiánov. "En la ciudad de Ribinsk se han detectado casos de falsificación de firmas en favor de la inscripción de la candidatura presidencial de Mijaíl Kasiánov", dijo un portavoz de la Fiscalía citado por la agencia oficial rusa Itar-Tass.


El proceso fue incoado por presunto delito de "falsificación de documentación electoral". Según la ley electoral de Rusia, uno de los requisitos para la inscripción de candidatos a la Presidencia promovidas por grupos o formaciones que no tienen representación parlamentaria es la presentación a la Comisión Electoral Central (CEC) de al menos dos millones de firmas de ciudadanos en respaldo de la candidatura.


Precisamente la CEC debe anunciar el resultado la verificación de las firmas presentadas por Kasiánov y Andréi Bogdánov, un político mucho menos conocido, también promovido por un una fuerza sin representación en la Duma o Cámara de Diputados. La apertura del proceso penal es una mala noticia para Kasiánov, pues la CEC está facultada para negarle la inscripción en caso de que más del 5 por ciento de las firmas presentadas no cumplan con los requisitos que exige la ley o sean falsas.

Presiones

El sábado pasado, Kasiánov denunció que las autoridades han lanzado una campaña de intimidación contra sus apoderados y partidarios que participaron en la recogida de firmas en favor de su candidatura. "Amenazan a la gente, la intimidan; la obligan a confesar actividades ilegales, a renunciar a la militancia política", afirmó en un declaración publica.


Kasiánov, de 49 años, ejerció la jefatura del Gobierno entre 2000 y 2004, durante el primer mandato de Putin, y tras un año de silencio que siguió a su destitución regresó a la política activa con duros ataques al Kremlin.


En Rusia -denunció- se menosprecian los "valores democráticos universales, como la separación de los poderes, la justicia y la prensa independiente, el desarrollo de la economía de mercado, la libertad empresarial, la protección de verdad de la propiedad privada y el pluralismo en la política".


La CEC ha inscrito hasta ahora tres candidatos para las elecciones presidenciales del próximo 2 de marzo: Dmitri Médvedev, viceprimer ministro primero y delfín del presidente ruso, Vladímir Putin, para sucederle en el Kremlin, el comunista Guennadi Ziugánov y el ultranacionalista Vladímir Yirinovki. Todos ellos fueron promovidos por partidos políticos con representación en la Duma, por lo que no necesitaron presentar firmas en apoyo a sus candidaturas.