HAITÍ

Duvalier, en libertad condicional

El ex presidente, que llegó el domingo a Puerto Príncipe, fue trasladado a la Fiscalía de la capital de Haití para ser interrogado por corrupción, robo y apropiación indebida.

El ex dictador Jean Claude Duvalier, en Puerto Príncipe.
Duvalier, en libertad condicional
ANDRéS MARTíNEZ CASARES/EFE

El ex presidente de Haití Jean Claude Duvalier fue trasladado ayer a la Fiscalía de Puerto Príncipe para ser interrogado. Más de cuatro horas después quedó en libertad condicional acusado de desvío de capitales, según fuentes judiciales. Duvalier abandonó la fiscalía acompañado por agentes de la Policía, pero sin esposas, y quedó a disposición de la justicia haitiana, según sus abogados, que no informaron sobre el destino al que será conducido, aunque se presume que a su hotel.


El fiscal de Puerto Príncipe Aristidas Auguste aclaró que Duvalier, conocido como 'Baby Doc', "no está libre" y se encuentra "bajo control del sistema judiciario". La Fiscalía anunció a última hora que Duvalier está imputado por los cargos de corrupción, robo y apropiación indebida de fondos públicos, entre otros delitos, durante su mandato (1971-1986).


El ex presidente fue trasladado a la Fiscalía desde el hotel donde se alojó a su llegada el domingo a Puerto Príncipe. Antes de abandonar su alojamiento, el fiscal Auguste y el juez Gabriel Ambroise permanecieron durante cerca de una hora en su habitación del hotel, al que llegaron en medio de un gran despliegue policial. Duvalier, quien no iba esposado, salió de su habitación y saludó en el exterior a varias decenas de seguidores.


La responsable del organismo 'Droits et democratie' (Derechos y Democracia), Daniele Magloire, ex integrante del Consejo de los Sabios de Haití, mostró su sorpresa por la falta de información acerca del procedimiento judicial y de las etapas que seguirán.


El director ejecutivo de la red Nacional de Defensa de Derechos Humanos, dijo a Efe que "Duvalier fue el cabecilla de muchos crímenes que se cometieron entre 1971 y 1986, que se pueden calificar de crímenes contra la humanidad". Según él, entre estos crímenes figuran "la tortura, la detención arbitraria, el asesinato y la ejecución sumaria. Son crímenes que no prescriben", aseveró.


Crímenes y robos


Jean Claude Duvalier gobernó entre 1971 y 1986 como sucesor de su padre, Francois Duvalier, quien lo había hecho desde 1957. La familia Duvalier lideró un régimen al que se considera responsable de numerosos crímenes y del desvío de sumas millonarias pertenecientes a los fondos del Estado.


En 1987 fue juzgado por un presunto delitode desvío en provecho propio de 120 millones de dólares de fondos del Estado, y en 1991 se presentó otra demanda por el supuesto robo de otros 800 millones que al parecer había depositado en diversos bancos de EE. UU., Suiza y Francia.


Amnistía Internacional (AI) consideró un "paso positivo" la detención de Duvalier, aunque estimó "insuficiente" que solo se le acuse formalmente de corrupción. AI había pedido el lunes al Gobierno haitiano que lo proceso por lo que consideró sistemáticas y generalizadas violaciones de los derechos humanos cometidas en Haití durante su régimen.


Por su parte, Cáritas opinó que tras el regreso del ex presidente corresponde a la justicia "hacer sus deberes y responder".


La Alta Comisaría de la ONU para los Derechos Humanos, por su parte, consideró que el inesperado regreso del ex presidente abre muchos interrogantes sobre "la impunidad y la rendición de cuentas" sobre sus años de mandato, pero desconoce si será posible procesarle. "No está claro si Haití está en posición de poder arrestar y abrir un proceso a Duvalier", dijo ayer en conferencia de prensa Rupert Colville, portavoz de la Alta Comisaría, Navi Pillay.


Enterrar el pasado


Haití ha preferido enterrar el pasado con más dedicación que los muertos del terremoto que aún asoman por los escombros. La represión de la dictadura no se estudia en las escuelas ni existen museos del horror, como los del 'apartheid' en Sudáfrica, sino que se apila una catástrofe sobre otra hasta que cualquier pasado fue mejor.


Como viene siendo habitual, Préval estaba ausente cuando regresó Duvalier. Sus asesores sostienen que fue el primer sorprendido, pero entre las muchas teorías que corren por las calles está la que le acusa de haber facilitado la vuelta para que, de alguna manera sin explicar, beneficie a su candidato favorito, Jude Celestin. Según el informe de la Organización de Estados Americanos (OEA), Celestin habría perdido las elecciones del 28 de noviembre, pese a que el Tribunal Electoral le otorgó suficientes votos como para disputar la presidencia en segunda vuelta con la ex primera dama Mirlande Manigat.


Otras teorías conspiratorias apuntan a Francia, el país donde el dictador ha vivido exiliado estos 25 años, que le dejó subir a un avión de Air France con pasaporte diplomático vencido. Duvalier voló de Paris a la isla de Guadalupe y de ahí a Puerto Príncipe. París admite que le había comunicado el deseo de regresar, sin dar fecha. Según el Gobierno sus intenciones solo quedaron claras cuando despegó de Guadalupe.