El actual presidente, el reformista de centroderecha Traian Basescu, y su rival del Partido Socialdemócrata (PSD), Mircea Geoana, se disputarán la Presidencia de Rumanía en una segunda vuelta, fijada para el 6 de diciembre, según los sondeos a pie de urna de los comicios celebrados ayer. De confirmarse estas encuestas, Basescu obtendría una ligera ventaja con entre un 32 y un 34% de los votos, mientras que Geoana lograría entre el 30 y el 32% de los sufragios.

El aspirante del Partido Nacional Liberal (PNL), Crin Antonescu, superó las expectativas al obtener un 22%, de acuerdo con esto sondeos, pero no pudo evitar quedar fuera de la carrera presidencial.

Según datos de la Oficina Electoral Central (BEC), la participación dos horas antes del cierre de los colegios electorales era del 50% de los más de 18 millones de rumanos que estaban llamados a las urnas. A la espera de que se conozcan hoy los primeros resultados oficiales, los candidatos reaccionaron anoche con prudencia a los sondeos a pie de urna.

"Más de un 50% del electorado ha votado a candidatos de derecha", declaró ante sus seguidores Basescu, que aspira a continuar su proyecto de modernización del país emprendido hace cinco años.

Esta referencia a los liberales fueron interpretados como un guiño del presidente saliente, que cuenta con el apoyo del cercano Partido Democrático Liberal (PD-L), para obtener también su apoyo en la segunda vuelta.

"El 6 de diciembre ganaremos juntos", manifestó Geoana, que había pedido el voto para librar a Rumanía del bonapartismo del que acusa a Basescu. El candidato socialdemócrata lanzó también un guante a los liberales, al alabar la campaña de Antonescu y calificarla de "sana" para la clase política rumana.

La jornada electoral transcurrió con incidentes aislados en todo el país. Cuatro personas fueron detenidas en distintas provincias por intentar comprar votos y se produjeron reclamaciones por varios casos de supuesto voto múltiple de un solo ciudadano.

Unicameralismo

Además de en las presidenciales, los rumanos votaron ayer en un referendo no vinculante la supresión de una cámara para adoptar el unicameralismo y reducir el número de parlamentarios de los 471 actuales a un máximo de 300.

La consulta fue convocada por el actual presidente y candidato a la reelección Traian Basescu, con una participación del 46% a dos horas del cierre de los colegios.

Los votantes que acudieron a las urnas votaron a favor del paso al unicameralismo en un 76% y de la reducción de legisladores en un 85%. Basescu celebró el resultado como una gran noticia para la modernización del sistema político rumano.

Un Ejecutivo provisional

El candidato que salga victorioso de la segunda vuelta en diciembre se encontrará un país sumido en una grave crisis política y económica, con un crecimiento negativo superior al 7% y un paro también del 7%, que dobla la registrada hace un año. Rumanía vive con un Gobierno provisional desde el pasado 13 de octubre, cuando una moción de censura derribó al Ejecutivo de centroderecha cercano a Basescu.

La gran prioridad del vencedor será designar un primer ministro que obtenga el apoyo del Parlamento, si el legislativo rechaza, como es previsible, al segundo candidato propuesto por Basescu, tal y como ya hizo con el primero. Para ello, podría convocar antes elecciones legislativas anticipadas a fin de buscar una nueva asignación de escaños que facilite la gobernabilidad.