ITALIA

'Anti-botellón', también en Roma

El detonante fue el asesinato de un turista americano en un local de nombre español: Zaragozana.

Calles sin alcohol a las 21:00 horas y, a las dos de la madrugada, la última copa dentro de los locales, son las medidas principales de las "ordenanzas anti-alcohol" que el alcalde de Roma, el conservador Gianni Alemanno, ha adoptado para evitar la degradación del centro histórico de la capital.


Estas ordenanzas, similares a las leyes que entraron en vigor en la Comunidad de Madrid en julio de 2002 y, posteriormente, en otras autonomías españolas, conocidas como leyes "anti-botellón", han sido aprobadas para limitar el aumento de la presencia de jóvenes que consumen alcohol en las plazas de la ciudad y para acabar con "la excesiva y desenfrenada movida", según el Ayuntamiento.


Las leyes en este sentido aprobadas, hasta el momento, por siete comunidades autónomas españolas -Madrid, Andalucía, Extremadura, Castilla-León, Comunidad Valenciana, Baleares y Galicia- respondían a la alarma social creada por el fenómeno conocido como "botellón", una costumbre adoptada por los jóvenes españoles por la que se congregaban en parques y plazas para beber alcohol.


Una alarma social que se ha trasladado a Roma, donde incluso algunos periódicos locales la han atribuido a una ampliación del horario de la 'movida' nocturna y una cultura alcohólica importadas por los jóvenes italianos precisamente de España, a través del turismo y las becas Erasmus, pero cuyo detonante fue el asesinato, el pasado día 5, de un turista americano en un local de nombre también español: Zaragozana.


Aunque prevén la prohibición del suministro de bebidas alcohólicas en botellas de cristal y en latas para llevar fuera del local, las disposiciones del consistorio romano se diferencian de las leyes españolas en que no legislan sobre el consumo, siempre que se efectúe en contenedores de plástico, y en que se refieren exclusivamente al horario nocturno.

"Situación de emergencia"


Asimismo, se trata de medidas excepcionales, debidas a lo que, desde el Ayuntamiento, se califica como "situación de emergencia", por lo que sólo está previsto que estén activas hasta el próximo 28 de febrero.


Las ordenanzas, que entraron en funcionamiento durante el último fin de semana, se han respetado en la inmensa mayoría de locales del centro, gracias también a un gran despliegue de policía en las principales plazas, pero su andadura ha empezado no sin protestas por parte de los jóvenes.


Éstos argumentan que las medidas de Alemanno sólo consiguen encarecer el consumo de alcohol, y no limitarlo, mientras que llaman la atención sobre las discotecas, las únicas eximidas de la prohibición de suministrar alcohol después de las dos de la mañana.


En total, en la primera noche de aplicación, la del domingo 18 de enero, la policía realizó más de cien registros en locales nocturnos e inspeccionó 48 negocios comerciales sólo en la zona de Trastevere, se impusieron 17 multas y cinco sanciones (una de ellas, penal), y fueron cerrados dos locales por falta de autorización.


Una situación con la que el Ayuntamiento se ha mostrado satisfecho, de tal forma que el concejal de Comercio romano, Davide Bordoni, ha dejado la puerta abierta a que las medidas adoptadas, en principio limitadas en el tiempo, continúen después de la fecha prevista para su finalización.


"Valoraremos el desarrollo en estas semanas y nos comportaremos en consecuencia, escuchando las exigencias de todos", ha precisado el responsable de la actividad comercial en la capital italiana, quien está "estudiando" que, en el futuro, el límite de las dos de la madrugada se aplique no sólo a la venta de alcohol, sino también al cierre efectivo de los locales.