CON BOMBAS DE RACIMO

Amnistía denuncia que EE. UU. mató a 41 civiles en Yemen

La organización humanitaria aporta fotografías de restos de los misiles del ataque a una supuesta base de terroristas de Al-Qaida.

Amnistía Internacional difundió ayer tres fotografías que evidencian que tropas de Estados Unidos lanzaron un ataque con bombas de racimo contra un supuesto campo de entrenamiento de Al-Qaida en Yemen y que mataron a 41 civiles, entre ellos 21 niños y 14 mujeres, además de otros tantos presuntos miembros de la organización terrorista dirigida por Osama bin Laden. La operación tuvo lugar el pasado 17 de diciembre en la comunidad de Al-Ma'jalah, en el área de Abyan, en el sur del país islámico.


Amnistía ha pedido información al Pentágono sobre este incidente, pero, según aseguró, no ha obtenido respuesta. «Un ataque militar de este tipo contra supuestos militantes sin un intento de detenerles es por lo menos ilegal. El hecho de que muchas de las víctimas fuesen mujeres y niños indica que fue totalmente irresponsable, particularmente teniendo en cuenta la posibilidad de usar munición de racimo», señaló Philip Luther, subdirector del Programa de Oriente Próximo y Norte de África de AI.


Las imágenes difundidas por Amnistía Internacional muestran una bomba de racimo sin estallar lanzada desde un misil de crucero Tomahawk BGM-109 D, parte de la unidad de propulsión y un trozo del proyectil, probablemente la sección de combustible del tanque.

Fragmentos de acero afilado


Según la organización humanitaria, este tipo de misiles, lanzados desde un buque de guerra o un submarino, está diseñado para transportar una carga útil de 166 bombas de racimo, cada una de las cuales puede estallar en más de 200 fragmentos de acero afilado que pueden causar lesiones a más de 150 metros de distancia. «Amnistía Internacional siente una honda preocupación por la evidencia de que las municiones de racimo parecen haber sido utilizadas en Yemen, cuando la mayoría de los países de todo el mundo se han comprometido a prohibir estas armas», dijo Mike Lewis, investigador sobre control de armamentos de la ONG.


Fuentes oficiales norteamericanas manifestaron que tropas de élite proporcionaron un apoyo esencial a Yemen, contradiciendo al Gobierno de Saná, que sostiene que fue una operación propia sin ayuda de nadie. Hasta el momento, Estados Unidos ha rechazado confirmar los informes que señalan que disparó misiles de crucero, lo que constituye la parte central de las nuevas denuncias de Amnistía Internacional.