RECORTES PÚBLICOS

Alemania anuncia el cierre de bases y cuarteles por la crisis

Defensa también estudiará suprimir la adquisición de armamento militar.

El ministro alemán de Defensa, Karl Theodor zu Guttenberg, anunció ayer el "inevitable" cierre de bases militares y cuarteles en Alemania debido a los recortes presupuestarios de su cartera por la crisis económica y financiera que afecta al país.


"Podríamos arrastrar esta decisión durante los próximos años y al final asustar a los afectados o anunciarlo para que se vayan preparando", dijo el ministro, quien comentó que todavía no hay ninguna decisión concreta, pero que se tomarán tras un detenido análisis de las necesidades del Ejército Federal.


En declaraciones a la televisión pública alemana ARD, Guttenberg señaló que también se va a estudiar la suspensión de proyectos de desarrollo y adquisición de armamento, para seguir adelante únicamente con aquellos que son de imperiosa necesidad.


Las reflexiones acerca del posible cierre de bases y cuarteles fueron criticadas inmediatamente por la Confederación de Municipios Alemanes, que teme graves pérdidas para las localidades afectadas, así como por parte de sindicatos y las representaciones de los militares germanos.


El secretario general del gubernamental Partido Liberal, Christian Linder, cuestionó por su parte en declaraciones a la prensa el desarrollo del sistema defensivo con misiles Meads y propuso estudiar una reducción de los pedidos del caza Eurofighter y el avión de transporte militar A400M.


Las reflexiones sobre las medidas de ahorro se han visto apoyadas por el antiguo Inspector General del Ejército Federal -cargo equivalente al jefe del Estado Mayor-, Harald Kujath, quien considera inevitables las restricciones, aunque ello llevará consigo también una reducción de las tareas y misiones del Ejército alemán.


Por otro lado, el Gobierno alemán estudia incrementar determinados impuestos con el objetivo de acelerar la consolidación del presupuesto, que podría registrar un déficit del 5% este año, según informó ayer el diario 'Handelsblatt', que citó fuentes próximas a la coalición de Gobierno.


Una carga extra


"No se trata de introducir un nuevo impuesto, como un gravamen al patrimonio, sino una carga extra para un pequeño grupo de contribuyentes", indicó un funcionario del Gobierno al periódico, apuntando que, incluso los socios de gobierno de Merkel no descartan esta medida, de la que aún no se habría precisado "cuánto subirían los impuestos ni qué impuestos se verían afectados".


Según fuentes cercanas a la coalición, el Ejecutivo estaría analizando dar marcha atrás en algunas de las recientes reducciones del IVA sobre algunos productos, así como la supresión de algunos beneficios fiscales, como los relacionados con la eficiencia energética.