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75 niños han muerto en ocho días de bombardeos

Destrozos causados en la Ciudad de Gaza
75 niños han muerto en ocho días de bombardeos
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La artillería se sumó a la aviación en una escalada de la ofensiva de Israel en Gaza, que entró en su segunda semana y causó 26 víctimas mortales, hasta elevar a 466 el número de muertos y a más de 3.000 el de heridos.


El ataque más cruento se produjo en la mayor mezquita de la localidad de Beit Lahiya, en el norte de la Franja palestina y donde once personas murieron y decenas resultaron heridas por el bombardeo de helicópteros Apache israelíes.


Los aparatos lanzaron tres bombas contra el templo, donde tras la matanza se extendió el caos ya que la aviación del Estado Judío siguió después bombardeando el área, lo que impidió a las ambulancias evacuar con rapidez a los heridos.


De acuerdo con el jefe de los servicios de emergencia en Gaza, Moawiya Hasanien, veinticuatro de los hospitalizados se encuentran en estado de "extrema gravedad".


El bombardeo fue acompañado con fuego de artillería disparado por tanques israelí desde fuera de la Franja, en la primera ocasión que se produce un ataque de ese tipo en la actual ofensiva.


Los tanques dispararon desde una distancia de unos quinientos metros de la línea fronteriza y, además de la mezquita, sus objetivos fueron posiciones que los milicianos palestinos suelen utilizar para lanzar cohetes sobre territorio israelí.


La aviación israelí bombardeó a lo largo de la jornada más de cuarenta objetivos y abatió en la capital de Gaza a un comandante de Hamás, Abu Zakaria al Yamal, cuando viajaba en su vehículo.


Se trata del segundo líder relevante del movimiento islamista muerto por fuego israelí desde que el pasado día 27 comenzó la ofensiva, después de que el jueves fuese abatido Nizar Rayan, dirigente de Hamás que se encargaba de coordinar la rama política con el brazo armado, las Brigadas de Ezedín al Kasam.


Otros dos milicianos de Hamás resultaron muertos y una niña sucumbió a sus heridas tras ser bombardeada su vivienda en la misma zona en un nuevo ataque que causa víctimas entre la población civil.


Según los datos de Hasanien, entre los muertos se encuentran al menos 75 niños y 37 mujeres, mientras que alrededor del cuarenta por ciento de los heridos son civiles.


El Ejército israelí bombardeó esta mañana un instituto en la localidad de Elatatra, en el norte de Gaza, al considerar que éste era utilizado como plataforma para el lanzamiento de cohetes y lugar de escondite para las operaciones armadas de Hamás.


También fueron atacados un túnel que comunicaba el sur de Gaza con el Sinaí egipcio, varios almacenes de armas, lanzaderas de cohetes y las viviendas de miembros del movimiento islamista.


Por su parte, las milicias palestinas no dejaron de disparar cohetes Grad, Kasam (caseros) y proyectiles de mortero contra las poblaciones del sur de Israel.


Los lanzamientos causaron dos heridos de metralla de carácter leve en la ciudad de Ashdod, una de las poblaciones israelíes más lejanas de Gaza que ha sido alcanzada y que hasta hace pocos días no estaba en el radio de fuego desde la Franja.


Los cohetes lanzados por los milicianos palestinos golpearon también Ashkelon, Netivot, Kiryat Malachi, Gan Yavne y la región de Eshkol, sin causar víctimas.


Aunque las milicias siguen con el disparo de proyectiles, el número de lanzamientos ha disminuido significativamente desde el comienzo de la ofensiva israelí.


Tras la primera jornada, en la que lanzaron 140 cohetes, el número de disparos fue oscilando hasta descender el miércoles, cuando se registraron 75, para bajar el jueves a 55 y a 30 ayer, viernes.


Siempre según datos del Ejército de Israel, los milicianos palestinos habían lanzado desde esta mañana y hasta primera hora de la noche una veintena de proyectiles.


Los cohetes de las milicias palestinas han provocado cuatro muertos y unos cuarenta heridos en Israel, y no han causado víctimas mortales desde el lunes.