AFGANISTÁN

400 talibanes escapan de la cárcel de Kandahar

Los presos habrían escavado un túnel de unos 360 metros de longitud durante cinco meses.

Imagen de la prisión de Kandahar, de donde se han escapado los talibanes
400 talibanes escapan de la prisión de Kandahar
AFP

Cientos de presos talibanes han escapado este lunes de la prisión de Kandahar, en el sur de Afganistán, a través de un túnel de unos 360 metros que los insurgentes excavaron durante cinco meses, según han confirmado fuentes oficiales y de la insurgencia.


Un portavoz talibán, Zabiullah Mujahid, ha dicho en un comunicado citado por la agencia afgana AIP que 541 presos han escapado del bloque donde estaban los «convictos políticos», aunque el jefe de la Policía de Kandahar, Sher Shah Yousafzai, ha afirmado que los huidos son en realidad 400. La Policía ha iniciado ya una investigación sobre los hechos, ha dicho Yousafzai.


Un dirigente talibán iha indicado que las tareas de excavación comenzaron en el exterior de la cárcel, y que les llevó cinco meses llegar a la sección política, a la cual son enviados los talibanes en el momento de su detención.


Los talibanes han concluido su tarea este domingo y han desplegado además un comando de «suicidas» alrededor de la prisión, para utilizarlo en el caso de que las fuerzas afganas descubrieran el plan de liberación e intentaran hacerlo fracasar.


«La puesta en libertad comenzó a las 23.00 de anoche (18.30 GMT), y solo tres presos conocían el plan. Fueron despertando a sus compañeros uno por uno. El último de ellos salió a las 3.30 de la madrugada», ha dicho Mujahid en la nota.


Esta es la segunda vez que ocurre un escape masivo en la cárcel de Kandahar. En el año 2008, en torno a un millar de presos huyeron de prisión, después de que los talibanes destrozaran las puertas mediante la explosión de una bomba ubicada en un camión.


Kandahar, la segunda mayor ciudad de Afganistán y capital de la provincia homónima, es considerado el principal bastión espiritual de los insurgentes, que tratan de derrocar al Gobierno afgano e implantar un Estado fundamentalista islámico.