Al menos 109 muertos por las lluvias torrenciales en Ruanda
La temporada de lluvias es peligrosa en un país con tantas laderas como Ruanda; la mayoría de ellas están habitadas y se usan como terreno de cultivo.
Al menos 109 personas murieron en el oeste y el norte de Ruanda debido a las lluvias torrenciales que sacudieron al país este martes, según informaron este miércoles las autoridades.
En concreto, 14 personas fallecieron en la provincia Norte y 95 en la provincia Occidental, donde los distritos más golpeados fueron Ngororero, Rubavu, Rutsiro y Karongi, confirmó el gobernador de este último territorio, François Habitegeko.
"Todavía estamos buscando casa por casa y, hasta ahora, hemos encontrado 95 (fallecidos) en nuestra provincia", declaró Habitegeko a EFE.
"La propiedad ha sido destruida, hemos perdido a muchas personas y la búsqueda continúa. También el número de heridos es alto. Realmente, estamos haciendo todo lo posible para ayudar”, agregó el gobernador.
Por su lado, el secretario permanente del Ministerio de Gestión de Emergencias de Ruanda, Philippe Habinshuti, afirmó que las autoridades planean que "las personas en peligro se muevan de manera temporal, para evitar que sufran desastres", en declaraciones recogidas por medios locales.
Las precipitaciones causaron deslizamientos de tierra y el desbordamiento de ríos, lo que dañó infraestructuras y supuso el corte de carreteras y la destrucción de viviendas donde, en ocasiones, se habían quedado encerradas familias.
Según las autoridades, el número de víctimas podría aumentar, ya que las operaciones de búsqueda y rescate siguen en marcha por vía área donde el acceso terrestre está cortado.
La temporada de lluvias supone un peligro en un país con tantas laderas como Ruanda, donde la mayoría de ellas están habitadas y son usadas como terreno de cultivo.
Ese riesgo es mayor este mes de mayo, puesto que la Agencia de Meteorología de Ruanda ha advertido de que las lluvias superarán ligeramente los niveles habituales en muchas partes del país.
El Ministerio de Servicios de Emergencia (Minema) anunció recientemente que, desde el pasado enero al 20 de abril, los desastres naturales similares causaron la muerte de 60 personas, destruyeron más de 1.205 viviendas y dañaron 2.000 hectáreas de terreno en todo el país.
