El canciller alemán, Olaf Scholz, ha afirmado este domingo que solo el presidente ruso, Vladimir Putin, puede romper las tablas que existen ahora mismo en Ucrania, aunque ha subrayado que los países occidentales no han perdido decisión en la respuesta a la agresión rusa.

"Desde mi punto de vista es necesario que Putin comprenda que no va a tener éxito con su invasión y su agresión imperialista y que tiene que retirar sus tropas. Es la base de las negociaciones", ha explicado Scholz en una entrevista en la cadena estadounidense CNN.

Scholz ha reconocido el estancamiento actual en el campo de batalla y ha resaltado el enorme daño que está causando a Ucrania la guerra, pero ha subrayado que no presionará a los ucranianos para que hagan concesiones. "No habrá decisiones sin los ucranianos", ha recalcado.

El dirigente alemán ha asegurado que Putin ha subestimado la fuerza de Ucrania y la "unidad" de sus aliados. "Es muy difícil saber qué pasará en Ucrania, pero está absolutamente claro que vamos a seguir apoyando a Ucrania por vía económica, humanitaria y también con armas", ha apuntado.

Además ha destacado que el presidente estadounidense "está muy informado sobre relaciones internacionales". "Creo que es uno de los presidentes mejor preparados sobre cómo funciona el mundo y es importante ahora que está convirtiéndose en un mundo cada vez más peligros", ha argumentado.

500 bajas diarias

Por su parte, el ministro de Defensa ucraniano, Olexij Resnikow, ha asegurado hoy que los soldados rusos son "carne de cañón" en la táctica de Moscú. Kiev afirma que el Ejército ruso está sufriendo bajas considerables sin lograr avances significativos en la toma de la ciudad de Bajmut, en la región oriental de Donetsk, que las tropas ucranianas defienden desde hace meses.

"Las bajas rusas alcanzan a diario los 500 muertos y heridos", afirmó Resnikow, en declaraciones al periódico alemán 'Bild am Sonntag'. Los soldados rusos son, según el titular de Defensa en el Gobierno de Kiev, "carne de cañón" en la táctica de la "máquina de picar carne" que aplica Moscú para tratar de conquistar desde hace meses la localidad situada en el este de Ucrania.

Resnikov señaló que Bajmut es "para los rusos un lugar simbólico" y por ello sus esfuerzos son tan significativos a la hora de tratar de tomar la ciudad, aunque la localidad es de escaso valor estratégico y su caída no tendría importantes consecuencias para el desarrollo de los combates en el Donbás.