Muere por asfixia una inmigrante de 36 años reducida por la Policía en México
Cuatro agentes detuvieron a la mujer, de origen salvadoreño y dos hijas, y la tiraron al suelo, donde uno de ellos la inmovilizó colocando la rodilla sobre su espalda hasta que murió.

Una inmigrante salvadoreña ha muerto por asfixia este fin de semana en México como consecuencia de la labor de los agentes municipales de Tulum, en Quintana Roo, sureste, que la detuvieron por supuestamente alterar el orden público.
De acuerdo con las fotografías y los vídeos que han circulado por las redes sociales y a los que ha tenido acceso el diario 'Milenio', cuatro agentes detuvieron a la mujer y la tiraron al suelo, donde uno de ellos la inmovilizó colocando la rodilla sobre su espalda hasta que murió por asfixia.
Una mujer murió cuando era sometida en el piso por cuatro elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública de #Tulum. #Especiales pic.twitter.com/Wq6jNyPAcK
— El Universal (@El_Universal_Mx) March 28, 2021
El fallecimiento de esta mujer ha traído consigo reacciones a nivel internacional, como las del propio presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien ha pedido a las autoridades mexicanas que apliquen "todo el peso de la ley" sobre los responsables, mientras su Gobierno se hará cargo de la manutención y los estudios de las dos hijas de la víctima.
Nosotros nos encargaremos de la manutención y estudios de las dos hijas de Victoria y de todo lo que necesiten.
— Nayib Bukele 🇸🇻 (@nayibbukele) March 29, 2021
Solo pedimos justicia. Que a los que hicieron esto les caiga todo el peso de la ley. https://t.co/m7vVh48Neg
Las autoridades mexicanas han informado de que los agentes que intervinieron en el suceso han tenido que acudir a declarar y "están detenidos". La víctima, Victoria Esperanza Salazar, de 36 años, estaba en el país gracias a un visado humanitario.
"La familia de la víctima contará con todo el apoyo del estado para salvaguardar su seguridad e integridad, así como garantizar su acceso a la Justicia", ha subrayado el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, quien ha insistido en que se castigará a los responsables y en que no "habrá impunidad".
Por su parte, desde el Gobierno mexicano, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ha condenado lo sucedido y ha dicho que son unos "hechos lamentables" que "no deben quedar impunes" para los que ha exigido justicia.