crisis sanitaria por el coronavirus

Reino Unido defiende la eficacia de su criticada estrategia

Nuevas medidas tratan de evitar el contacto social innecesario pero apuestan por la 'invitación' a los ciudadanos antes que por la limitación.

Britain's Prime Minister Boris Johnson speaks during a news conference on the ongoing situation with the coronavirus disease (COVID-19) in London
Boris Johnson speaks during a news conference on the ongoing situation with the coronavirus disease (COVID-19) in London
POOL

El Oficial Médico Jefe del Gobierno británico, Chris Witty, asesor científico del Ministerio de Sanidad, afirmó en la presentación de las nuevas medidas para evitar la expansión de la epidemia que «nuestro objetivo único es reducir muertes». Witty explicó la estrategia del Gobierno en función de las causas de mortandad en diferentes fases de la epidemia.

El Gobierno ha pedido a la población que evite todo contacto social innecesario por un tiempo indefinido. De nuevo, el Ejecutivo de Boris Johnson no recurre a la legislación sino que intenta alentar un sentido de responsabilidad entre sus ciudadanos. La petición tuvo un acento particular cuando fue dirigida a personas con más de 70 años o más jóvenes pero con problemas de salud.

Según Witty, habrá tres causas principales de mortandad. La muerte por coronavirus de una minoría de personas, por debajo del 1% de los infectados. Las de pacientes que fallecen por padecer antes un trastorno grave de su salud. Y «las muertes indirectas», causadas «por falta de atención si el Servicio Público de Salud es desbordado».

Witty, junto al primer ministro, Boris Johnson, y el jefe de Asesoría Científica, sir Patrick Wallance, insistieron en que dan mucha importancia a los test de infección, que aumentarán en las próximas semanas, pero esperan que muy pronto el servicio de investigación que apoya al NHS les ofrezca un test que detecte personas que han tenido el virus en su cuerpo y ya no tienen síntomas. Lo consideran muy importante para medir el crecimiento de inmunidad grupal.

Los tres participantes en la primera de las conferencias de prensa diarias prometidas por el Gobierno en su política de comunicación sobre el coronavirus evitaron aludir a las críticas que ha recibido su estrategia, que incluye advertencias de que el número de test, 44.105, es demasiado pequeño para que los algoritmos que proyectan la evolución de la epidemia sean fiables. También, la más tosca idea de que Johnson y los suyos no ven con malos ojos la muerte de cientos de miles de británicos, especialmente la de pensionistas.

Alisar la curva de contagios

Las nuevas medidas -como pedir que no se viaje cuando no sea imprescindible- continúan la estrategia de aliento o ánimo, que un número creciente de teóricos de la política y asesores de gobiernos consideran que es más eficaz que el ejercicio de una autoridad firme y conminatoria. No se prohíben los grandes eventos, pero las agencias del Estado no ofrecerán sus servicios de emergencia para apoyarlos y por tanto no pueden celebrarse.

Patrick Wallance insiste en que el objetivo de la estrategia es alisar la curva del ascenso y caída de la epidemia, distribuir las infecciones en el tiempo para que los servicios públicos no sean completamente desbordados. Y cree que tiene aún tiempo, «porque estamos varias semanas por detrás de otros países». Pero en Londres la epidemia se está extendiendo con más rapidez que en otras regiones del país.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión