La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA, en inglés), anunció este lunes que en su próxima cena anual no habrá un humorista encargado de dar un discurso, lo que rompe una tradición de más de tres décadas, a raíz de la polémica actuación de la comediante Michele Wolf, el pasado abril.

En un comunicado, la junta directiva de la WHCA informó de que el orador principal en su cena anual, prevista para el 27 de abril de 2019, será el historiador Ron Chernow, conocido por sus biografías de varios presidentes estadounidenses.

La decisión desecha una tradición iniciada a comienzos de la década de 1980, y por la que cada año, un comediante daba un discurso en tono de humor o sátira sobre el presidente de EE.UU. y los medios de comunicación que le cubren, con el objetivo de restar peso a los rifirrafes cotidianos entre ambos.

La última vez que la cena no tuvo un humorista fue en 2003, cuando el entonces presidente, George W. Bush, acababa de invadir Irak y la asociación optó por dejar de lado la comedia y programar en su lugar una actuación del músico Ray Charles.

Pero el año siguiente, los periodistas retomaron la tradición, y desde entonces han pasado por la cena humoristas tan famosos como Stephen Colbert, Jimmy Kimmel, Jay Leno y Conan O'Brien.

La gala perdió buena parte de su brillo debido a la ausencia del actual presidente, Donald Trump, en las dos cenas que se han celebrado durante su Presidencia, una manifestación más de su tensa relación con la prensa que, además, ha privado a la cita del también tradicional discurso humorístico del mandatario de EE.UU.

No obstante, durante los dos últimos años la WHCA siguió invitando a humoristas, y el pasado abril la encargada del monólogo fue Michele Wolf, quien en general siguió la tónica de otros humoristas y, como ellos, rozó varias veces el límite de lo políticamente incorrecto.

Pero la cómica hizo un par de bromas que incomodaron a la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, que había decidido asistir a la cena por primera vez.

"(Sanders) quema los hechos y luego usa la ceniza resultante para crear el perfecto maquillaje ahumado de ojos", dijo Wolf, quien también comparó a la portavoz con un personaje de la serie "The Handmaid's Tale", lo que le generó acusaciones de que se había metido con el físico de la portavoz, algo que la humorista negó.

La polémica llevó al presidente de la WHCA, Olivier Knox, a plantearse prescindir de los comediantes en la siguiente cena, debido en parte a que varios medios de comunicación amenazaron con cortar sus fondos para la gala -que sirve para financiar becas de periodismo- si no se acababa con el rito del humorista.

El encargado del discurso del año que viene es el autor de la biografía de Alexander Hamilton, uno de los "padres fundadores" de Estados Unidos, que inspiró el exitoso musical de Broadway creado por Lin-Manuel Miranda, y hoy prometió que su intervención no estará exenta de humor.

"Aunque nunca me han considerado un cómico, prometo que mi lección de historia no será aburrida", afirmó Chernow.

No obstante, la decisión no estuvo exenta de polémica, y la propia Wolf recurrió a su cuenta de Twitter para criticarla.

"Los de la @WHCA son unos cobardes. Los medios de comunicación son cómplices. Y yo no podría estar más orgullosa (de mí misma)", escribió la humorista.