Italia y Alemania comparten el objetivo de reducir la llegada de inmigrantes

Los ministros del Interior de Italia y de Alemania, Matteo Salvini y Horst Seehofer, constataron este miércoles tras un encuentro bilateral que sus países comparten el objetivo de reducir las llegadas de inmigrantes en sus territorios y aumentar los controles fronterizos externos.

"El objetivo común con Alemania es que queremos menos desembarcos, menos muertos y menos inmigrantes", afirmó Salvini a la prensa tras mantener este miércoles una reunión con Seehofer en la ciudad austríaca de Innsbrück, donde mañana los titulares de este ramo de los Veintiocho se reunirán en un Consejo informal para tratar la cuestión migratoria.

Los dos ministros del Interior, que defienden sendas tesis duras en esta materia, abordaron, según Seehofer, el control más eficaz de las fronteras exteriores de la Unión Europea y la reducción de la inmigración, dos asuntos en los que Italia y Alemania "trabajarán juntos".

"Pediremos un apoyo verdadero de Europa para controlar las fronteras exteriores, para compartir el peso que hasta hoy ha sostenido solo Italia de los desembarcos, para cambiar las reglas de las misiones navales europeas que hasta hoy han portado miles de inmigrantes solo en Italia", afirmó Salvini.

También trataron en la reunión la cuestión de la inmigración secundaria o interna, aquellos movimientos de los demandantes de asilo de un Estado miembro a otro, si bien Italia es partidaria de alcanzar un acuerdo europeo sobre la cuestión migratoria antes de pasar a debatir la inmigración interna.

"Hemos conseguido que se empiece a razonar para subdividir a los inmigrantes que llegan a Italia (...) y solo cuando haya soluciones a esto podremos considerar lo de los movimientos internos", advirtió Salvini.

"Primero los (movimientos) primarios", insistió el político italiano, aunque aseguró estar "abierto a debatir sobre todo" y confirmó que su equipo y el de Seehofer mantendrán reuniones sobre este asunto con vistas a cerrar un acuerdo bilateral.

El ministro alemán agregó que "tratarán de reunirse de nuevo en julio para valorar esas conversaciones", aunque no descartó que la discusión se alargara hasta el mes de agosto.

"Si entramos en agosto, no va a fracasar por eso. El espíritu fue muy constructivo. Pero entre un buen inicio de conversaciones y una solución al final suele haber siempre conversaciones difíciles", valoró Seehofer.

Ambos ministros se mostraron satisfechos con el resultado de su primera reunión bilateral, de la que destacaron su "buen espíritu" y que "comienza un proceso de amistad".

"Estoy contento de que haya habido una bilateral italo-alemana y no la bilateral franco-alemana de siempre que se limitaba a hacer los deberes a Europa", concluyó Salvini.