Los países de la Unión Europea (UE) acercaron este martes posiciones sobre el procedimiento por el que serán reubicadas las dos agencias comunitarias que tienen actualmente sede en Londres y que deberán abandonar esa ciudad cuando se materialice el 'brexit'.

Veintisiete ministros, reunidos en el consejo de Asuntos Generales en Luxemburgo, trataron este martes los seis criterios que se tendrán en cuenta para elegir una nueva sede a la Agencia Europea de los Medicamentos (EMA) y la Agencia Bancaria Europea (EBA), pero, aunque se hicieron progresos, el procedimiento en sí para el reparto volverá a ser abordado por los líderes europeos en su cumbre de esta semana, dijeron fuentes comunitarias.

"El procedimiento pretende garantizar que estas dos importantes agencias se hayan reubicado en otros Estados miembros a su debido tiempo, reduciendo el impacto en su funcionamiento al mínimo", indicó en una rueda de prensa tras la reunión la ministra maltesa de Asuntos Europeos, Helena Dalli, cuyo país preside este semestre la UE.

Los criterios abordados por los ministros buscan garantizar que las agencias puedan continuar su actividad tras la fecha en que el Reino Unido salga de la Unión, la accesibilidad, unas instalaciones educativas adecuadas para los hijos de los funcionarios, acceso al mercado laboral y a los cuidados sanitarios, a la comunidad empresarial y el reparto geográfico.

Dalli recordó que varios Estados miembros ya han mostrado su interés en acoger estas agencias, pero los interesados todavía tendrán hasta finales de julio para enviar formalmente su propuesta.

España, que ya es sede de tres agencias comunitarias en Bilbao, Alicante y Vigo, ha propuesto Barcelona para acoger la EMA. Los ministros acordaron que la decisión la tomarán de común acuerdo, conforme a un procedimiento específico que propondrán los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, informó el Gobierno luxemburgués tras la reunión.

Habrá un voto de los Veintisiete en octubre una vez evaluadas las candidaturas, sobre la base de criterios objetivos. El reparto de las agencias "no forma parte de la negociación, sino que es una consecuencia del 'brexit', indicó por su parte el negociador jefe de la Unión para el 'brexit', Michel Barnier, quien subrayó que "el proceso corresponde a los Veintisiete".

El político francés también recalcó que todo acuerdo transitorio que se decida en la salida del Reino Unido de la Unión Europea dependerá del control del Tribunal de Justicia de la UE.

"Siempre he dicho que la cuestión de los periodos transitorios, su naturaleza, longitud, que será corta, estará enmarcada en el mantenimiento de la duración de la totalidad de la arquitectura de la regulación de supervisión y el control del Tribunal de Justicia europeo", indicó.

Barnier respondió así a una pregunta sobre unas declaraciones del ministro británico de Economía, Philip Hammond, quien dijo en Londres que su país necesitará un periodo fuera de la unión aduanera en el que aún se apliquen los actuales acuerdos de fronteras aduaneras.

"Habrá probablemente necesidad de ciertos periodos transitorios", reconoció Barnier, quien consideró además que la propia "naturaleza de la futura relación" con Londres deberá aclarar esta cuestión.

Según dijo, eso tendrá "consecuencias sobre el contenido y la dimensión de ese acuerdo transitorio", pero dejó claro que el momento para hablar de eso aún no ha llegado.

Afirmó que la UE centrará sus esfuerzos en los próximos meses en "lograr un acuerdo sobre los principios de una retirada ordenada del Reino Unido" en sus temas prioritarios: los derechos de los ciudadanos, el acuerdo financiero y la frontera de Irlanda.

Preguntado también sobre si la negociación entorno a la frontera irlandesa dependerá del acuerdo comercial con Londres -que no se tratará en los primeros meses de las conversaciones-, Barnier rechazó esa posibilidad y dejó claro que es un asunto prioritario que se empezará a tratar "de inmediato".